ASPIRINA

¿Tomar aspirina en dosis bajas ayuda a las personas con enfermedad hepática?

La enfermedad hepática se refiere a una variedad de afecciones que afectan el hígado y su capacidad para funcionar correctamente

Una investigación encontró un nuevo beneficio de la aspirina
Una investigación encontró un nuevo beneficio de la aspirinaCréditos: (Canva)
Escrito en ESPECIALIDADES el

La aspirina es un medicamento que se utiliza para aliviar el dolor, la fiebre y la inflamación de distintos tejidos y órganos, pero ¿tomarla en dosis baja ayuda a las personas con enfermedad hepática? A continuación, te lo decimos.

La enfermedad hepática se refiere a una variedad de afecciones que afectan el hígado y su capacidad para funcionar correctamente. La Clínica Mayo señala que los problemas hepáticos pueden ser causados por una variedad de factores que dañan el hígado, como los virus, el consumo de alcohol y la obesidad.

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Tomar aspirina en dosis bajas puede ayudar a las personas con enfermedad hepática

Una nueva investigación encontró que los pacientes con enfermedad hepática esteatosis asociada al metabolismo sin cirrosis que tomaron aspirina diaria en dosis bajas demostraron reducciones significativas en el contenido de grasa hepática durante 6 meses en comparación con pacientes similares que tomaron un placebo.

"En enfermedad hepática sin cirrosis, la aspirina en dosis bajas, 81 miligramos diarios, condujo a una disminución de la grasa hepática y a una mejora de los marcadores de inflamación hepática y fibrosis", informó Robert M. Wilechansky, becario de hepatología de trasplantes en el Hospital General de Massachusetts en Boston.

(Foto: canva)

¿Cómo la aspirina ayuda a mejorar la enfermedad hepática?

En estudios preclínicos, se ha demostrado que la aspirina tiene efectos antiinflamatorios y antitumorales en el hígado a través de la inhibición de la cicoxigenasa-2 y la señalización del factor de crecimiento derivado de plaquetas, así como a través de la modulación de los lípidos bioactivos, explicó Wilechansky.

En estudios observacionales, el uso de aspirina se asoció con una reducción en la prevalencia de esteatosis hepática y progresión de la fibrosis en pacientes con enfermedad hepática, y hubo una disminución en la incidencia de carcinoma hepatocelular y mortalidad relacionada con el hígado entre los pacientes con hepatitis viral.

En cuanto al mecanismo de acción potencial de la aspirina para los pacientes con enfermedad hepática, Wilechansky anotó que podría haber cierta reducción en la esteatosis, y "si hay una reducción en la inflamación, podríamos ver cierta reducción en la esteatohepatitis".

En la investigación participaron 80 adultos con enfermedad hepática y fueron asignados al azar para recibir aspirina 81 mg una vez al día o un placebo durante 6 meses.

A pesar de los buenos resultados que mostró la aspirina en dosis baja para ayudar a las personas con enfermedad hepática, los investigadores señalaron que hacen falta más investigaciones para recomendar tomar esta medicina en dosis completas o para que sea recomendado como tratamiento contra las enfermedades del hígado.