Esther comenzó a presentar síntomas de la menopausia antes de cumplir los 50 años. Ella recuerda que todo comenzó con sudores y sofocos especialmente en la noche, que la obligaban a levantarse para cambiarse de ropa.
“En las noches me tenía que cambiar la ropa de dormir una o dos veces porque me empapaba. Si hacía frío guardaba un cambio debajo de la almohada para que cuando me lo pusiera estuviera calientito. Es horrible, la ropa queda empapada y no podía dormir sin pantalones porque sentía las piernas pegajosas”, cuenta en entrevista con Sumédico.
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El 18 de octubre se conmemora el Día Mundial de la Menopausia para crear conciencia sobre la necesidad de prestar atención a la salud de las mujeres durante este proceso y mejorar sus experiencias al atravesarlo.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) menciona que la población mundial de mujeres posmenopáusicas va en aumento. Tan solo en 2021, las mujeres en edad igual o superior a los 50 años representaban el 26% de toda la población femenina mundial, mientras que hace 10 años esa proporción solo alcanzaba el 22%.
En México existen aproximadamente 14 millones 847 mil mujeres de 50 años o más, según el Censo de Población y Vivienda 2020, mientras que la esperanza de vida es de 78,1 años.
Desgraciadamente, en la mayoría de los países incluyendo México, la concienciación sobre la menopausia y el acceso a la información y los servicios relacionados presentan deficiencias importantes. Se trata de un tema silenciado en las familias, las comunidades, los trabajos y centros de salud, dice la OMS.
¿Qué es la menopausia y qué síntomas causa?
Mayo Clinic define a la menopausia como el momento que marca el final de los ciclos menstruales y se diagnostica después de que transcurren 12 meses sin que se tenga el periodo menstrual. Es un proceso biológico natural que puede producirse entre los 40 y los 50 años.
De acuerdo con la doctora Imelda Hernández, especialista en ginecología endocrina y menopausia, en México el promedio de edad en que se presenta la menopausia se sitúa entre los 48 y 49 años y durante esta etapa de transición hormonal, disminuye la producción de estrógeno en el ovario, una hormona femenina que cumple diversas funciones en el organismo.
La disminución de esta hormona provoca distintos síntomas físicos como sofocos, irritabilidad, bochornos o calores, disminución del deseo, sequedad vaginal, así como síntomas emocionales como depresión, alteración del sueño y disminución de la energía o fatiga crónica.
Esther relata que además de los sudores y sofocos, tuvo muchas alteraciones en sus emociones y afirma que entre las cosas más difíciles de la menopausia para ella fueron los cambios de humor y el agotamiento.
“Me di cuenta de que todo comenzaba con un sentimiento, es decir, nostalgia, tristeza, alegría, angustia, todo pegaba directo al corazón, lo hacían que se acelerara y de ahí se disparaba una corriente de calor que recorría mi cuerpo y comenzaba a sudar. Hasta lo más mínimo se maximizaba. En los días más difíciles quería bloquear mis sentimientos, pero era cuando estaba más frágil”, explica.
Debido a estos cambios en sus emociones, tuvo que hablar con su familia para pedirles comprensión.
“Vivo con 5 hombres, mis 4 hijos jóvenes y mi esposo y hablé con ellos. Estoy en un cambio hormonal, no sé en qué momentos voy a estallar o cuándo voy a estar triste, respeten mi espacio, si les quiero hablar bien y si no, no insistan. Si grito o lloro, no es nada relacionado con ustedes, son mis hormonas”, relata.
Esther comenzó también a tener problemas con el sueño y algunas noches necesitaba que alguno de sus hijos la acompañara a caminar un rato para cansarse y desestresarse.
“Muchos días no tenía ganas de levantarme, pero me obligaba a hacerlo, aunque fuera en cámara lenta”, detalla.
Mujeres viven solas el proceso debido al estigma
Es importante destacar que la menopausia es un solo día de la vida, cuando después de un año ya no se presenta el periodo, mientras que el climaterio es el periodo de transición que incluye el antes, durante y después de la menopausia.
La doctora Hernández señala que todas las mujeres pasaremos por esa etapa de la vida, ante lo cual es fundamental generar mayor conocimiento entre madres, hermanas, esposas, hijas, amigas, profesionistas, amas de casa, pero también en la sociedad en general, porque aún existen mitos, desconocimiento y estigma sobre la menopausia.
Debido a ello, muchas mujeres no hablan sobre lo que están pasando y prefieren vivir solas este proceso, normalizando los síntomas por la pena, vergüenza o desconocimiento del tema.
“Este tabú afecta no solo la vida personal de cada mujer, sino también su entorno laboral, pues sabemos que hasta 40% de las mujeres que trabajan reportan más de 6 síntomas asociados a la menopausia durante su jornada laboral”, alerta la ginecóloga.
¿Cómo se debe tratar la menopausia?
José Cruz Rivas Herrera, académico de la Facultad de Estudios Superiores Zaragoza (FESZ) de la UNAM, explica que a pesar de que la menopausia es uno de los momentos importantes en la vida de las mujeres, no están informadas al respecto y tampoco acuden al médico durante este periodo.
El también tutor de maestría y doctorado en el posgrado de Enfermería de la UNAM, agrega que la mayoría de las mujeres que atraviesan la menopausia acuden cuando ya hay cambios físicos notables o complicaciones, lo que afecta su calidad de vida.
Los síntomas de la menopausia son algo natural y no podemos evitarlos, sin embargo, el experto refiere que no es necesario sufrirlos ya que hay forma de controlarlos si se acude con un especialista.
La recomendación de Rivas Herrera es acudir al médico a partir del momento en que se detecta una menstruación irregular, antes de que desaparezcan los sangrados, para recibir un tratamiento como hormonas sustitutivas que ayudan a paliar los síntomas.
Sin embargo, el experto recalca que cada mujer requiere de un tratamiento médico personalizado y vigilado, por lo que la sustitución hormonal no está recomendada en todos los casos debido a que hay tumores donde interviene la producción de hormonas, como el cáncer de ovario.
En el caso de Esther, relata que no quiso recibir un tratamiento hormonal, pero sí necesitó de medicamentos para los problemas de sueño que le estaban afectando durante el climaterio.
“Soy asmática y tengo el hábito de ir al médico cada mes. La doctora me preguntó si quería medicamentos, le respondí que no, solo algo parta controlar el sueño. Me recetó diazepam pero con la advertencia de que solo tomara un cuarto en casos extremos. También me recomendó una dieta saludable, vitaminas y recurrí a productos naturistas a base de camote”, recuerda.
Hacer cambios en el estilo de vida también es fundamental para controlar los síntomas en esta etapa y al respecto, Esther menciona que mantuvo ocupada su mente para sobrellevar las molestias.
“No recibí tratamiento especial, comencé a ocupar más mi mente. Hice un diplomado tras otro, siempre me he mantenido ocupada y si debo llorar, lloro y no pasa nada. Salgo a caminar y entre los árboles puedo gritar, cantar, hablar. Principalmente voy a la Iglesia, disfruto orar, escuchar la palabra de Dios y ayudar a otros, da mucha satisfacción hacer algo por la gente que sabes que no te podrá pagar con dinero, pero te dará una sonrisa”, señala.
La menopausia puede causar enfermedades
Expertos de Mayo Clinic advierten que después de la menopausia, el riesgo de padecer ciertas enfermedades aumenta, como:
- Enfermedades cardiacas y de los vasos sanguíneos. Esto ocurre por la disminución de los niveles de estrógeno, por lo que es importante hacer ejercicio regularmente y tener una dieta sana.
- Osteoporosis. Hace que los huesos se tornen débiles y quebradizos, lo que genera más riesgo de fracturas. En el primer año después de la menopausia es cuando se pierde densidad ósea rápidamente.
- Incontinencia urinaria. Los tejidos de la uretra y la vagina pierden elasticidad, lo que causa necesidad frecuente de orinar o pérdida de orina al toser, reír o levantarse. También puede haber más infecciones de las vías urinarias.
- Aumento de peso. En la transición a la menopausia y después, muchas mujeres aumentan de peso debido a que el metabolismo se vuelve más lento. Lo ideal es comer de forma más saludable y hacer ejercicio regular.
“Todas las mujeres deben acudir de forma periódica a evaluación con un especialista para prevenir complicaciones, detectar oportunamente riesgos inherentes a esta etapa de la vida y recibir un tratamiento adecuado para sentirse plenas”, dijo la doctora Imelda Hernández.
Rivas Herrera añade que algunas mujeres pueden experimentar una menopausia temprana o antes de los 40 años. Esto ocurre principalmente por trastornos hormonales, problemas de miomas o periodos irregulares, aunque recalca que “por fortuna no son casos comunes”.
Esther concluye diciendo que no le recomendaría algo a quienes están pasando por la menopausia, porque cada caso es distinto, solo que busquen a Dios y hagan ejercicio para sobrellevar las molestias. “Si no tienen para un deportivo hay muchos parques donde pueden caminar, correr y ejercitarse. Ámense mucho”, dice.
Por su parte, Cruz Rivas destaca que la mejor forma de conmemorar el Día Mundial de la Menopausia es promover que las mujeres y todos los miembros de la familia se informen sobre los cambios que ocurren en esta etapa, para dar acompañamiento y apoyo a las mujeres, quienes también deben acudir a revisiones médicas desde que notan periodos irregulares.