Alimentarse sanamente, realizar ejercicio, tener una higiene de sueño, reducir el estrés son algunas actividades recomendadas para fomentar el bienestar día con día. Esto no sólo permite mantenernos con energía, también fomentar el cuidar diversos órganos del cuerpo, como el corazón, ante distintos problemas de salud. Otra alternativa que podemos añadir es identificar los padecimientos que le rodean. Por ello, hoy te compartimos las diferencias entre un infarto y una angina de pecho.
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Es necesario contar con la información sobre diversos padecimientos que involucran al corazón porque permiten identificar signos. Al tenerlos en cuenta, esto ayuda a recibir un diagnóstico y tratamiento adecuado, permitiendo mantener una calidad de vida. Si quieres seguir cuidando tu corazón y conocer más sobre los infartos o las anginas en el pecho, continúa leyendo esta nota.
De acuerdo con la Secretaría de Salud, en México cerca de 220 mil personas fallecieron por enfermedades cardiovasculares en 2021, de las cuales 117 mil fueron por un infarto al miocardio. Los infartos pueden prevenirse al evitar o controlar los factores de riesgo, como el tabaquismo, presión arterial alta, colesterol elevado y diabetes no controlada.
¿Qué se puede confundir con una angina de pecho? Un infarto
De acuerdo con Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades, el corazón es un órgano del tamaño aproximado de un puño. El corazón está compuesto de tejido muscular y bombea sangre a todo el cuerpo. La sangre es transportada al cuerpo mediante vasos sanguíneos. El proceso de transportar sangre a todo el cuerpo es conocido como circulación. El corazón y los vasos sanguíneos componen el aparato cardiovascular.
Uno de los problemas que puede presentarse en el aparato cardiovascular es un infarto. MedlinePlus informa que la mayoría de infartos son provocados cuando un coágulo bloquea una de las arterias coronarias. Las arterías coronarias son las responsables de llevar sangre y oxígeno al corazón. Si el flujo sanguíneo es bloqueado, el corazón sufre por falta de oxígeno que provoca la muerte de células cardíacas.
El portal añade que en un infarto la persona presenta un dolor durante más de 20 minutos. Los síntomas pueden desaparecer y regresar, entre estos se encuentra ansiedad, tos, desmayos, mareo, náuseas, vómitos, palpitaciones, dificultad para respirar y sudoración. Un infarto puede presentarse cuando la persona está descansando o durmiendo, aumenta su actividad física o después de un estrés emocional o físico súbito.
Por su parte, la angina de pecho, explica Mayo Clinic es un tipo de dolor en el pecho causado por la reducción del flujo sanguíneo al corazón. Una angina en el pecho es un síntoma de la enfermedad de arterias coronarias. Un dolor de angina de pecho suele describirse como un dolor acompañado de presión, pesadez u opresión. La persona puede expresar ardor, inflamación, presión o dolor en los brazos, cuello, mandíbula, hombros o espalda.
Una manera sencilla de distinguir un infarto a una angina de pecho, menciona 20minutos, es la característica del dolor en el pecho. Si el dolor aparece después de practicar ejercicio físico intenso y desaparece al descansar, es probable que sea una angina en el pecho estable. Si el dolor continúa, empeora o viene y se va, probablemente sea un infarto.
Sea cual sea el dolor, será necesario acudir con un especialista para prevenir un estado de emergencia. Para cuidar el corazón Offfice of Disease Prevention and Health Promotion recomienda alimentarse saludablemente, mantenerse activo físicamente, dejar de fumar, evitar el humo de quienes fuman, controlar el colesterol y la presión arterial, tener un consumo moderado de alcohol y controlar el estrés.
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