Las vías biliares son una red de conductos que conectan el hígado, la vesícula biliar y el intestino delgado y cuando el cáncer afecta a esta parte fundamental del sistema digestivo, puede no presentar síntomas, lo que lo hace más peligroso por su difícil diagnóstico.
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Conocido como colangiocarcinoma o cáncer de vías biliares, se trata de la segunda neoplasia maligna más recurrente, superado solamente por el carcinoma hepatocelular, que corresponde al 80-85% de los cánceres de hígado, muchos provocados por cirrosis, según el Consenso Mexicano de Carcinoma Hepatocelular.
El principal riesgo de este tipo de cáncer es que en etapas tempranas no presenta ningún síntoma, es hasta las etapas avanzadas que se pueden presentar manifestaciones como:
- Ictericia (coloración amarillenta de la piel y las mucosas)
- Prurito (hormigueo o irritación de la piel)
- Pérdida de peso
- Colangitis (infección los conductos biliares)
De acuerdo con el doctor Maen Abdelrahim, médico gastroenterólogo oncólogo del Hospital Houston Methodist, “los síntomas pueden ser inespecíficos o inexistentes” en la mayoría de los casos.
Causas del cáncer de vías biliares
Respecto de los factores de riesgo del cáncer de vías biliares o colangiocarcinoma, el experto destaca que estos pueden variar, ya que van desde la cirrosis, infección por hepatitis B y C, así como el reflujo hepático o biliar.
Otro factor es la inflamación del conducto biliar o colangitis, y en ocasiones enfermedades crónico-degenerativas como la diabetes.
La aparición de este tipo de cáncer es más común en pacientes mayores de 50 o 60 años y debido a que se trata de unos de los tipos de cáncer más raros, las opciones de tratamiento son limitadas.
“En general, el pronóstico es como cualquier tipo de cáncer: si éste se diagnostica en etapa temprana, existirá un mejor pronóstico que con las etapas tardías”, explica el doctor Maen Abdelrahim.
En ciertos casos, el cáncer de vías biliares puede ser curable llevando a cabo la resección de éste o a través de un trasplante, el cual sólo se hace en el caso del colangiocarcinoma hiliar. Por lo tanto, solo si la detección se hace en etapa temprana, el cáncer puede curarse y tener buenos resultados.
Lamentablemente, 2 de cada 3 casos se presentan en etapa avanzada debido a la falta de síntomas o la inexactitud de estos, lo que solo deja opciones de tratamiento paliativo, que incluyen quimioterapia, inmunoterapia y radioterapia.
El Instituto Nacional del Cáncer en Estados Unidos agrega que no hay exámenes de detección de rutina para encontrar un cáncer de vías biliares antes de que se presenten signos y síntomas.
Otro problema es que detectar esta enfermedad puede ser complicado debido a que no es fácil hacer una biopsia en esta zona y los síntomas se pueden pasar por alto fácilmente, incluso por el propio personal médico.
El Dr. Maen Abdelrahim concluye recordándole a la población que “la detección temprana es crucial en esta enfermedad y alentaría a la población general a ser consciente de ésta y reconocer los síntomas que pueden estar relacionados con la enfermedad.”
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