Cuando hablamos del objeto más sucio de la casa, seguro que lo primero que se te viene a la cabeza es el inodoro, pero la realidad es que el control remoto de la televisión puede acumular mucha más suciedad que pone en riesgo tu salud. Te damos el truco para limpiarlo correctamente.
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El control remoto es un objeto con el que tenemos contacto todos los días, en algunos casos varias veces y prácticamente toda la familia lo utiliza también. Debido a ello, es un objeto que acumula mucha suciedad y que, si no limpiamos de forma adecuada, nos pone en riesgo de infecciones.
Con el uso, el control remoto va acumulando grasa, células muertas, sudor, restos de comida, bacterias y virus que luego pueden causarnos problemas de salud. De hecho, un estudio realizado por la Universidad de Houston y presentado en la Sociedad Estadounidense de Microbiología, mostró la cantidad de suciedad que puede acumularse en este objeto.
Tras estudiar diversos objetos en un hotel, encontraron que los más contaminados eran el control remoto y los interruptores de luz. Tal vez pienses ´bueno, eso es en los hoteles´ pero ¿cuándo fue la última vez que limpiaste el control remoto? Probablemente ya ni lo recuerdes.
Pero antes de que quieras rociar de desinfectante el control de la televisión o los servicios de streaming, es importante que aprendas a limpiar correctamente este objeto, no solo para quede realmente libre de suciedad y bacterias, sino para no estropear su funcionamiento.
¿Cómo desinfectar el objeto más sucio de la casa? Truco para limpiar el control remoto
A pesar de que todos los días tocamos el control remoto, la frecuencia con la que lo limpiamos no siempre es la ideal y tampoco el método que usamos para lograrlo, por ello, te damos este truco de limpieza. Necesitarás:
- Un paño o trapo limpio
- Alcohol
- Agua
- Cepillo de dientes que ya no uses
El procedimiento es muy sencillo, de acuerdo con Azteca Uno, comienza por quitarle con cuidado las pilas al control remoto, luego, humedece el paño en una mezcla de agua con un poco de alcohol. Suavemente, limpia todo el control y las telas, si notas que hay suciedad en zonas difíciles, usa el cepillo de dientes para remover todo a la perfección.
Puedes esperar a que el control se seque por completo para un mejor efecto desinfectante o si necesitas usarlo, seca con otro paño limpio, coloca las pilas y usa como siempre.
Recuerda que la limpieza en tu hogar es clave para mantener el bienestar y en el caso del control de la televisión, cuando no lo limpias podrías desarrollar infecciones de la piel, respiratorias o intestinales debido al contacto de la suciedad con tu piel o zonas sensibles como tus ojos, nariz y boca.
Lo ideal es que limpies el control remoto al menos dos veces al mes y que evites tocarlo mientras estás comiendo o tienes las manos sucias.
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