El paracetamol es un analgésico eficaz para el control del dolor leve o moderado causado por distintas afecciones, así como el tratamiento de la fiebre. Sin embargo, debemos tomarlo con precaución, ya que puede tener efectos secundarios negativos. Te decimos 5 claves para evitar que el paracetamol dañe tu hígado.
Es común que ante un dolor de cabeza, de muelas o articular, pensemos que lo mejor es tomar un paracetamol, pues es un medicamento accesible y que se encuentra en cualquier farmacia sin la necesidad de una receta médica.
Te podría interesar
Pero hacerlo puede poner en riesgo tu hígado sin que te des cuenta y es que podemos tomar una dosis mayor de la que realmente necesitamos y con ello, dañar este órgano. Tranquilo, esto no significa que no debes consumir el medicamento, simplemente debes tener algunas precauciones que te detallamos a continuación.
En general el paracetamol es un medicamento seguro y una buena opción ante dolores leves o fiebre, pero no está exento de riesgos, un consumo excesivo puede comprometer la salud de tu hígado.
¿Cómo evitar que el paracetamol dañe tu hígado?
De acuerdo con la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), debido a que el paracetamol se metaboliza en el hígado, se debe administrar con precaución, para ello, hay que tomar en cuenta lo siguiente:
- No tomes paracetamol en exceso
Tomar durante mucho tiempo cantidades elevadas de paracetamol favorece una acumulación de miligramos que poco a poco, afectan el hígado. Una investigación en Estados Unidos retomada por el portal especializado Mejor con Salud, hasta 60 millones de personas consumen paracetamol en una semana. De ellos, se estima que hay 30 mil ingresos hospitalarios por daño hepático ocasionado por sobredosis del medicamento.
Una intoxicación por paracetamol ocurre cuando se consumen 150 miligramos por kilogramo de peso en un solo día, lo que equivale a 8 gramos del medicamento. A lo largo de varios días, puede darse un daño hepático que puede manifestarse con vómitos y color amarillento de la piel.
En una fase más avanzada, puede haber problemas de coagulación y encefalopatía, así como insuficiencia renal.
- Lee las etiquetas de los medicamentos
Cuando no lees las etiquetas de los medicamentos, hay más riesgo de una intoxicación por combinar fármacos, especialmente cuando te automedicas con antigripales en comprimidos y jarabes.
Los antigripales suelen combinar entre 3 y 4 principios activos, entre los que se incluye el paracetamol, así que si tomas varios medicamentos con este componente, puedes poner en riesgo la salud de tu hígado.
- Evita automedicarte
Por su puesto, una de las recomendaciones más importantes para evitar la intoxicación con paracetamol es no automedicarse, pues así evitamos consumir dosis inadecuadas del medicamento, sobre todo si ya tenemos problemas hepáticos o estás embarazada.
Comenta con el médico si es seguro consumir este analgésico, en qué cantidad y por cuánto tiempo, así podrás consumirlo de forma segura.
- Consume dosis regulares del medicamento
En el mercado existen presentaciones de paracetamol de hasta 1000 mg, pero no es necesario tomar esas cantidades, con la presentación de 500 mg se obtienen los mismos resultados sin un consumo excesivo.
Solo en determinados casos se necesitan dosis superiores pero el médico es quien debe indicar en qué cuadro clínico es necesario, como un dolor o infección por patología crónica.
- Sé más cuidadoso si tienes problemas adicionales
En general debes evitar el consumo excesivo de paracetamol, pero sobre todo en casos donde puedes ser más susceptible a un daño hepático, como cuando sufres consumo excesivo de alcohol, si tienes una edad avanzada o sufres desnutrición o malnutrición.
Otra recomendación es que, si ocurre una rara reacción de sensibilidad, debes descontinuar el medicamento de inmediato. Por ningún motivo lo tomes con alcohol ni lo mezcles con otros medicamentos que también contengan paracetamol.
La UNAM alerta que si el tratamiento con paracetamol por 10 días es insuficiente para controlar el dolor y reducir la fiebre o aparecen nuevos síntomas, se presenta enrojecimiento o sudación, ardor de garganta por más de dos días seguido de fiebre, dolor de cabeza, erupción, náusea o vómito, será necesario ver al médico para un cambio en la dosis o el medicamento.
(Con información de UNAM, Mejor con Salud, MedlinePlus)