Comer es una necesidad humana que todas las personas realizan durante todos los días ya que, sino no podrían vivir, pero de acuerdo con la Universidad de Harvard retrasar las comidas cuatro horas afecta al organismo y a continuación te diremos cómo lo hace.
Es importante que sepas que debes comer bien y a tus horas si quieres bajar de peso, ya que alimentarte con productos chatarras no te hará gozar de este beneficio. Hacer ejercicio también es importante si quieres perder unos kilitos.
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¿Cómo retrasar las comidas cuatro horas afecta al organismo?
Según un artículo de la Escuela de Medicina de Harvard, señala que, aunque cada caloría que ingerimos al día cuenta, para bajar de peso o mantener el peso ideal es muy importante saber a qué hora debes alimentarte.
De acuerdo con una investigación elaborada por Harvard, retrasar las comidas cuatro horas desencadena efectos fisiológicos que conducen a aumentar el riesgo de padecer obesidad.
La investigación revela que comer tarde impide adelgazar ya que duplica las probabilidades de que te dé más hambre, lo que hace que sea más difícil regular la elección de alimentos y la ingesta de calorías.
También se encontró que no comer a horas preestablecidas disminuye la quema diaria de calorías, ralentizando el metabolismo y modificando ciertos genes que controlan los depósitos de grasa.
“Descubrimos que comer cuatro horas más tarde hace una diferencia significativa en cuanto a los niveles de hambre, la forma en que quemamos calorías después de comer y la forma en que almacenamos grasa”, indicó Nina Vujovic, investigadora principal.
Quienes retrasan su comida también tienen más antojos no saludables
Aunque no sorprende que el hambre se hizo presente en quienes cenaron tarde y no desayunaron, lo curioso es que todos presentaron antojos de alimentos salados ricos en carbohidratos como:
- Arroz
- Pan
- Pizza
- Pasta
- Papas
La conclusión de la investigación fue que retrasar todas las ingestas cuatro horas disminuyó la hormona leptina en un 16% y aumentó la grenila en un 34%.
También se encontró que comer tarde causó una disminución en el gasto de energía a lo largo de 24 horas, aunque se necesitan estudios futuros para verificar esto, indicaron los investigadores.