Frío o calor, nuestro cuerpo puede sentir el cambio de temperatura. Desde quemaduras en la piel hasta manos resecas, podemos tener diversas molestias. Sin embargo, como nuestra especialidad en la adaptación, contamos con herramientas para controlar esos malos momentos y seguir luciendo un buen aspecto. Por ello, hoy te compartimos algunos consejos si tu hijo tiene labios secos.
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Los labios secos en niñas y niños son un problema común que puede causar molestias y preocupaciones para padres y cuidadores. Los labios de los niños son especialmente susceptibles a la sequedad debido a factores como el clima frío y seco, la exposición al sol sin protección, la respiración por la boca y la falta de hidratación adecuada.
¿Qué son los labios secos? ¿Cómo prevenir los labios secos en niñas y niños? ¿Qué hacer si las y los niños tienen los labios secos? Continúa leyendo esta nota para conocer sobre los labios secos y sus cuidados. Así no sólo le ayudarás a tu hijo a evitar una molestia, también fomentarás su diversión sin ningún problema.
¿Qué hago para no tener labios resecos?
De acuerdo con Neutrogena, la piel de los labios es mucho más fina que la del resto del cuerpo y no tiene glándulas sudoríparas ni sebáceas. Eso significa que la piel de los labios puede secarse mucho más rápido que la piel de la cara, por ejemplo, porque no tiene lípidos protectores que mantengan la humedad. En invierno es muy común que los labios se agrieten, pues el aire frío y la escasa humedad pueden afectar su humectación.
Según Pediatrics, una o un niño pueden atravesar piel agrietada, piel seca y áspera en manos, pies o labios. En el caso de los labios, en las y los niños pueden agrietarse a causa del sol o del viento. Las grietas en los labios ocurren sobre todo si el niño tiene la costumbre de mojarse los labios con la lengua. La piel alrededor de los labios puede volverse de color rosado y resecarse. Aunque los labios secos no presentan un problema en sí pueden ser un signo que atender si:
- Parece haber infección, es decir pus o enrojecimiento que se extiende y hay fiebre
- Sangrado de labios agrietados
- Grietas en los pies que hacen más difícil caminar
- Labios rojos agrietados y fiebre durante 5 días o más
- El niño parece estar muy enfermo por su aspecto o por su comportamiento
En caso de no existir otro signo o evento relacionado con los labios secos, puede tratarse diversas maneras. MejorconSalud explica que existen medidas de cuidado y de prevención para prevenir la sequedad de los labios o su posterior agrietamiento, por ejemplo:
- No pasar la lengua por los labios: uno de los hábitos que se observa en muchos niños es lamerse los labios, incluso de manera inconsciente. En consecuencia, se cree que esta acción los mantiene humedecidos, pero en realidad la saliva, por su composición, tiende a evaporarse con mayor rapidez y los labios quedan más secos que antes
- Mantenerse bien hidratado: una buena y variada alimentación junto a una correcta hidratación contribuyen a mantener en buenas condiciones toda la superficie cutánea
- Controlar la pasta de dientes: existen pastas dentales que contienen un compuesto conocido como lauril sulfato de sodio que puede quitar la capa protectora lipídica de la piel. En consecuencia, al no contar con esta barrera en los labios, provoca una irritación intensa que puede contribuir a agrietarlos
- Respirar por la nariz: en algunos casos, después de que el niño haya padecido algún cuadro respiratorio que lo mantuvo obligado a respirar por la boca, continúa haciéndolo. Esto lleva a que los labios se sequen y se agrieten con mayor facilidad
- Utilizar bálsamos labiales: se recomienda el uso de bálsamos labiales que contengan manteca de karité, aloe vera, vaselina, manteca de cacao o ácido hialurónico
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