Seguridad, confianza, amor, cariño, respeto, libertad, protección, estabilidad, entre otros, son algunos factores que niñas y niños encuentran en sus madres. Este lazo durante su crianza les permite compartir una relación la cual va fortaleciéndose y construyéndose con el paso del tiempo. Sin embargo, los momentos felices no son eternos y algunas madres pueden notar un comportamiento menos agradable cuando están presentes. ¿Es cierto que los niños hacen más berrinches cuando está mamá?
En casa, mamá puede lidiar con problemas para que el niño o la niña recojan sus juguetes, realice su tarea o siga una orden que evite algún accidente, pero si pregunta en la guardería o con otro familiar, el niño parece seguir sin mayor distracción lo que se indique. ¿Por qué sucede esto? ¿Cómo evitar que el niño haga más berrinche cuando está la mamá? Son algunas preguntas en las cuales encontrarás respuesta en esta nota.
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Antes de iniciar, recuerda que nadie enseña a ser madre, nadie enseña a ser padre y nadie enseña a ser cuidador, por lo cual, es necesario mantener la paciencia y la comunicación en esta etapa. Buscar una educación más empática y comunicativa permitirá construir una relación saludable con tu hijos, fomentando su bienestar en diversas etapas de su vida.
¿Por qué mi hijo se porta mal sólo conmigo?
De acuerdo con Educación Inicial, es normal que niñas y niños entre 1 a 3 años hagan berrinches. Dependiendo de cómo sean manejados, favorecerá la presencia de comportamientos desafiantes o promoverá la independencia, la autoestima y el manejo de emociones. Cuando los niños son pequeños, no saben cómo regular y expresar sus emociones, provocando que pierdan el dominio sobre sí mismos y les cueste pensar antes de actuar, prever las consecuencias de su conducta y actuar conforme a las normas.
Álvaro Bilbao menciona que las madres suelen ser las protectoras y quienes dan respuesta a las necesidades de los hijos, por lo cual son asociadas con la supervivencia. En este caso, los niños aumentan su mal comportamiento para llamar la atención de su madre. Debido a que les gusta ser el centro de atención, sentirse admirados y que les reconozcan su comportamiento, suelen mostrar un mejor comportamiento con otros para aumentar su aceptación y pertenencia.
Dicho comportamiento puede provocar en las mamás frustración, estrés, ansiedad y enojo al tener que realizar más acciones para que la niña o el niño controlen su berrinche o entienda las razones por las cuáles no puede realizarse lo que busca. Ante esto, la solución no es actuar con gritos o golpes, MejorconSalud deja una serie de soluciones ante estos berrinches:
- Comprobar que en realidad le das suficiente atención al niño: si le prestas atención sólo cuando se porta mal o hace berrinche, reforzarás su mala conducta
- No le prestes atención cuando haces berrinches: el berrinche suele aumentar de intensidad cuando se presta atención, en lugar de ello, busca que baje la intensidad y la posibilidad de repetición
- Refuerza la conducta positiva: reconoce aquellas actividades que haga bien mediante gestos, palabras y acciones
- No te rindas y sé positiva: ante una acción hostil, el niño tendrá un comportamiento negativo
Manejar los berrinches de los niños no es fácil, por lo cual Childwelfare aconseja que ante ellos, madres y padres ayuden a su hijo a concentrarse en otra cosa, les permitan tomar decisiones propias, sigan una rutina de actividades divertidas y descanso, anticipar las desilusiones que puede atravesar y felicitarse cuando controle sus berrinches y exprese sus sentimientos con palabras.
(Con información de Educación Inicial, Álvaro Bilbao, MejorconSalud, Childwelfare)