Cuando nace un bebé, la familia busca ofrecerle las mejores alternativas de cuidado, desarrollo y aprendizaje. Terapias sensoriales, juegos acordes a su edad o equipo que permita mayor comodidad son algunas de las alternativas que madres, padres y cuidadores optan para tener condiciones adecuadas en su vida diaria. Entre estas prácticas, está el gateo, una etapa que varios bebés se han saltado, pero que tiene diversos beneficios.
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El gateo, informa Capacita, es una etapa parte del desarrollo motor de niñas y niños la cual suele producirse entre los 6 a 9 meses de vida. La fase del gateo es el primer paso a la independencia del bebé. En esta etapa, el tronco encefálico deja de tener tanto control, dando paso a que el cerebelo pase a tener una mayor implicación. Desde dicho momento, el bebé será capaz de realizar acciones destinadas a un fin.
Si quieres conocer más sobre sus beneficios y sus etapas, continúa leyendo esta nota. A la par, te compartiremos algunos consejos para que puedas fomentar el gateo en tu bebé. Cabe destacar que si tienes problemas para practicar el gateo con tu bebé, consultarlo con un especialista de salud. Así podrás obtener una serie de ejercicios que te ayudará a lograrlo.
¿Qué son las etapas de gateo?
El gateo, informa Clínica Alemana, significa el desplazamiento de los brazos y piernas. Es una forma que utiliza el ser humano para trasladarse por sí mismo donde el menos aprende a mantener el equilibrio sobre sus manos y rodillas, practicando el moverse hacia delante y hacia atrás. Mediante este movimiento, el bebé fortalece los músculos que le permitirán equilibrarse sobre sus pies.
De acuerdo con BB Grenadine, el gateo crea rutas de información al conectar hemisferios cerebrales, permite darle mejor sentido a la vista para distinguir rutas largas y cortas, aumenta su equilibrio que le permitirá un desplazamiento, fomenta la coordinación y fuerza, así como permite el desarrollo de motricidad fina. Dicha etapa es relevante porque es el antecedente de caminar, una actividad que el bebé realizará a lo largo de su vida.
Eresmamá detalla que cuando el niño logre mantener la cabeza recta y sostenerse sobre sus brazos, puede aprender a darse la vuelta. Esto le ayudará a desarrollar las siguientes habilidades, pues tanto el gateo como el caminar requieren de movimientos de rotación y sincronización. Entre las etapas del gateo está el balanceo, la coordinación, la dimensión corporal y la fuerza desarrollada de los miembros.
Clínica Basion destaca que la fisioterapia pediátrica desempeña un rol relevante en la estimulación del gateo en los bebés. A través de diversos enfoques terapéuticos personalizados, las y los especialistas en salud podrán evaluar la fuerza muscular, la coordinación y la postura del bebé, identificando las áreas donde requiera mayor atención. Entre estas prácticas está:
- Proporcionar boca abajo diferentes superficies para introducir texturas
- Colocar juguetes interesantes a una corta distancia
- Utilizar túneles para crear un espacio donde el bebé pueda arrastrarse
- Animar al bebé a rodar de un lado a otro
- Colocar cojines o almohadas en forma de rampa para que el bebé practique cuesta arriba o cuesta abajo
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