Sin darse cuenta, hay personas que sienten atracción por personas con una personalidad similar a la de su mamá o papá y terminan con una pareja que es idéntica a alguno de los dos ¿a qué se debe? Expertos lo explican.
El tipo de relación que construyes con tu pareja muchas veces es influenciado por los traumas o heridas de la infancia que te causaron tus padres, ya sea que hayan estado presentes o no.
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De acuerdo con un artículo de Psychology Today, esto ocurre porque en la infancia aprendemos las creencias, mentalidades y patrones que vemos en nuestros cuidadores primarios, que suelen ser los padres.
Al llegar a la edad adulta, nuestro comportamiento y creencias suele estar condicionado por lo que aprendimos de niños, lo que tiene un impacto importante en el tipo de pareja por la que nos sentimos atraídos y la relación que construimos.
¿Por qué busco parejas como mis padres?
Existen investigaciones que indican que las primeras experiencias influyen en la calidad de nuestras relaciones románticas, pues esas vivencias tempranas le dan forma a nuestros patrones y creencias internalizadas sobre las relaciones románticas.
Así, cuando somos adultos y entramos en una relación de pareja, nuestras heridas no resultas favorecen algunos patrones como:
- Emociones superficiales
- Una pareja que permite o refuerza los roles de tu infancia
- Necesidad de ser “salvado” por tu pareja o buscar “arreglar” a la persona con la que estás
- La unión con tu pareja se basa en traumas compartidos
- No hay intimidad emocional con la pareja
- Tu dinámica de pareja imita las experiencias de la infancia con los padres o bien, buscas algo totalmente opuesto por los traumas que nos causaron
- Hay un profundo miedo al abandono o rechazo
- Estás con tu pareja pero tienes una sensación de vacío o depresión
Si te identificas con alguna de estas características, significa que probablemente estas en una relación con una persona que es igual a tu mamá o tu papá y que inconscientemente buscas debido a tus heridas en la infancia.
Las razones por las que esto ocurre son esencialmente las siguientes:
- Falta de madurez emocional
Algunas personas buscan establecer una relación con una pareja que no tiene madurez emocional y no está lista tampoco para este crecimiento, lo que crea un ambiente ideal para favorecer la regresión emocional de la infancia.
- Miedo al cambio
Otra razón es que salir con alguien que no es en nada parecido a las personas que te criaron es muy desafiante, porque en el fondo prefieres quedarte en la zona de confort, con lo que te resulta familiar, aunque sea muy "tóxico", en lugar de empezar algo nuevo.
- Buscas compensar tus carencias
Tener una pareja que es igual a tu mamá o tu papá también puede ser una dinámica en que se usa la relación como una forma de ofrecer el amor, apoyo u orientación incondicionales que no se tuvieron en la infancia.
- Crees que no eres suficiente
Las creencias de que no eres lo suficientemente bueno que tienes desde la infancia puede favorecer un autosabotaje que impida construir relaciones estables, porque tienes heridas sin resolver.
- Normalizas las relaciones disfuncionales
Casarte con alguien que tiene una personalidad como la de tus padres también puede ser causado por que te sientes “cómoda” en una relación disfuncional, ya que aprendiste que así son las relaciones al ver una relación tóxica en tu casa y eso es lo que buscas en tus parejas.
Recuerda que lo que viviste en la infancia no es una condena, habla con un experto en relaciones de pareja para buscar apoyo emocional que te ayude a superar los traumas de abandono o invalidación que tienes y puedas construir una relación sana y duradera.