El jamón serrano, informa Atilano Anllo, es el producto que se obtiene de las partes traseras del cerdo siendo salado en crudo y curado de forma natural. El jamón serrano se obtiene de cerdos blanco cuya crianza es realizada sin ningún tipo de ejercicio y se alimenta a base de piensos. Es un jamón con poca grasa y más carne que otro tipo de productos, teniendo una curación que va desde los 10 y 16 meses dependiendo de su peso.
¿Qué tan recomendable es el consumo de jamón serrano? ¿Cuáles son sus beneficios? ¿Cuáles son sus perjuicios? ¿Qué propiedades contiene? Son algunas de las preguntas que resolveremos en esta nota con el fin de que puedas tomar la mejor decisión sobre tu alimentación y la de tus seres queridos. Recuerda que para cuidar tu salud lo adecuado será mantener un equilibrio entre los alimentos que consumes.
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De acuerdo con datos del Consejo Mexicano de la Carne (Comecarne) retomados por El Universal, en México el consumo de carne y embutidos se jerarquiza de la siguiente manera: salchichas de ave, jamones de ave, jamones de carnes rojas (sean horneados o ahumados) y otro tipo de carne entre los que están salchichas gourmet, mortadela, tocino, chorizo, longaniza y queso de puerco.
¿Cómo se consume el jamón serrano?
Según SaberVivir, el jamón serrano es uno de los alimentos más típicos y tradicionales de la gastronomía española. Su sabor distinguido se debe a un proceso de curación con sal, secado, maduración y envejecimiento lo que convierte al jamón serrano en un alimento estrella. Posee diversos nutrientes, especialmente proteínas de valor biológico que contiene vitaminas y minerales.
“En cuanto sus propiedades nutricionales podemos destacar sus proteínas de alto valor biológico, el aporte de minerales interesantes, como el hierro, el calcio o el zinc. De igual forma, debemos poner atención en su aporte de grasas, principalmente saturadas, aunque esto puede varias según la forma de cría y de alimentación del cerdo. Al igual contiene un elevado aporte de sodio debido a la sal adicionada durante en proceso de maduración”, menciona Aitor Tabanco, dietista y nutricionista para Infosalus.
El jamón serrano es una carne procesa las cuales son transformadas mediante salazón, curado, fermentación, ahumado, marinado, adobo y otros procesos que se han utilizado para mejorar y preservar el alimento. Estas carnes procesadas se han recomendado ser evitadas o limitadas debido a sus asociaciones con diversas enfermedades, entre ellas el cáncer de colón, explica CuídatePlus.
“El jamón serrano puede ocupar un espacio limitado dentro de nuestra dieta, teniendo en cuenta el consumo total de carnes y siempre sin desplazar a otros alimentos cuyas propiedades nutricionales son más interesantes, como las frutas, las verduras o las legumbres”, agrega Aitor Tabanco, dietista y nutricionista para Infosalus.
La Nevera Española subraya que consumir un buen jamón serrano o de cebo no sólo debe centrarse en el placer de las persona, también en su buen estado. Es necesario conocer las pautas para conservarlo con las medidas adecuadas y así evitar malestares. Por ello, deja 4 claves para conocer si el jamón serrano está en buen estado o no:
- Exceso de grasa: si el jamón serrano tiene demasiada grasa puede producir una sensación oleosa a la hora de consumirlo, así como tener un sabor rancio
- Puntos blancos: esto no hace referencia a lo blanco del jamón serrano que lo caracteriza, sino aquellos que vienen en el paquete. Estos indican que el jamón serrano ha sido curado correctamente, si aparecen conforme los días, se habla de una presencia de ácaros
- Mal olor de la pieza de jamón serrano: esto indica que no se ha curado correctamente
- Jamón reseco de color oscuro: la resequedad se debe a una mala conservación del mismo, por lo cual es necesario cerrar bien el paquete a la hora de entrar en la nevera
(Con información de Atilano Anllo, El Universal, SaberVivir, Infosalus, CuídatePlus, La Nevera Española)