Un nivel alto de glucosa en sangre se conoce médicamente como hiperglucemia y afecta principalmente a las personas con diabetes. Existen muchos factores que favorecen este problema, pero uno de los más importantes es la alimentación. Conoce la fruta que ayuda a controlar la glucosa después de comer.
No tratar un aumento de glucosa en sangre tiene consecuencias peligrosas y podría ser necesaria la atención médica de emergencia. Mayo Clinic advierte que la hiperglucemia persistente, incluso si no es grave, puede ocasionar complicaciones que afectan los ojos, riñones, nervios y corazón.
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Entre los síntomas de un aumento de glucosa en sangre destacan la orina frecuente, el aumento de sed, visión borrosa o sentirse débil, pero algunas veces puede no manifestar ninguna molestia.
Por ello, es importante evitar los factores que aumentan la glucosa en sangre y una de las formas más efectivas de lograrlo es controlar los niveles de azúcar que se ingieren con los alimentos a diario, buscando orientar la dieta a una alimentación balanceada.
Fruta para controlar la glucosa
De acuerdo con un estudio publicado en The Journal of Clinical Endocrinology and Metabolism, la manzana es un excelente aliado para el control de la glucosa, especialmente después de comer. La razón es que esta fruta contribuye a la salud metabólica, incrementando la tolerancia a la glucosa, la sensibilidad a la insulina y el metabolismo de las grasas.
El portal Bopa Salud menciona que la manzana tiene polifenoles, que son antioxidantes que protegen las células del páncreas que se encargan de la producción de insulina, lo que ayuda a mantener un nivel correcto de glucosa en sangre.
Además de los antioxidantes, la manzana es rica en fibra dietética, un nutriente que ralentiza la absorción de azúcar en sangre, lo que ayuda a tener mayor energía y evitar los picos de glucosa que pueden ser peligrosos.
Su aporte de fibra también favorece la sensación de saciedad, que es ideal para evitar los picoteos de comida o el consumo de snacks con mucha azúcar o carbohidratos.
Recuerda que un plan alimenticio balanceado es clave para mantener un nivel de insulina adecuado, procura comer porciones más pequeñas y evitar bebidas azucaradas. Realiza actividad física regular y toma tus medicamentos como te lo indicaron. También registra tu nivel de glucosa sanguínea varias veces a la semana o varias veces al día y consulta al médico ante cualquier duda.
(Con información de Revista Semana, Mayo Clinic, UnComo)