Muchas personas tienen la costumbre de beber refrescos dietéticos con la idea de que estos no son malos ya que no contienen tanta azúcar como los normales, sin embargo, está comprobado que igual hacen daño y hoy te diremos cómo afectan a la salud.
La Clínica Mayo señala que los refrescos dietéticos no son una bebida saludable ni una solución milagrosa para bajar de peso. Aunque el cambio de refrescos comunes a dietéticos puede ahorrar calorías, no está claro si son efectivas para evitar la obesidad y los problemas de salud relacionados a largo plazo.
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¿Cómo afecta a la salud el beber refrescos dietéticos?
Aunque los refrescos dietéticos son menos malos que los refrescos normales, estos también generan daños a la salud y a continuación, te los decimos.
- Puede provocar enfermedad hepática
Una investigación encontró una asociación entre el consumo excesivo de refrescos dietéticos y el riesgo de la enfermedad hepática esteastósica asociada a disfunción metabólica (MASLD), una de las enfermedades más prevalentes. Las estimulaciones actuales sugieren que esta enfermedad afecta al 46% de la población mundial.
"Hasta donde sabemos, este es el primer estudio que explora la asociación entre el consumo de refrescos dietéticos y MASLD en una muestra representativa a nivel nacional, y nuestros hallazgos pueden proporcionar recomendaciones dietéticas valiosas para la prevención y el tratamiento de MASLD", escribieron los autores del estudio.
- Debilitamiento de los huesos y dientes
La mayoría de los refrescos contienen una elevada cantidad de ácido fosfórico, esta sustancia hace que el calcio sea eliminado a través de la orina, esto hace que los huesos se debiliten, pudiendo desarrollar a largo plazo problemas como osteoporosis. Asimismo, la acidez de este tipo de bebidas puede causar erosiones en la superficie del esmalte dental debilitando los dientes.
- Aumento de la presión arterial
Los refrescos dietéticos pueden causar un aumento gradual de la presión arterial debido a sus elevadas vanidades de sodio y cafeína. Asimismo, la cafeína en conjunto con los demás ingredientes de esta bebida puede agravar el sistema digestivo causando inflamación, deshidratación y un desequilibrio en la flora bacteriana intestinal.
Diversos estudios indican que el consumo en exceso de fructosa, que se encuentra presente también en algunos refrescos dietéticos, también es una de las principales causas de hipertensión arterial.
- Alteraciones en el cerebro
Este tipo de bebidas puede ocasionar alteraciones a nivel cerebral debido a su contenido de cafeína y debido a que estimulan diversas sustancias en el organismo que se han visto relacionadas con la demencia, incluyendo el Alzheimer. Además, la cafeína también puede causar problemas de insomnio, agitación, temblores y dolor de cabeza.
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