Rosalba Reyes, previo a ser diagnosticada con el Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH) consideraba que era una persona “lenta y con problemas de concentración”, así se describe, además, con dificultades para terminar actividades en las que en un principio mostraba mucho interés y de repente ya no lo tenía. A los 28 años, luego de ser madre y tras una fuerte depresión, una psicóloga y un psiquiatra la diagnosticaron.
“En mi cabeza hay mucho ruido, siempre tengo muchas ideas de cosas que hacer y quiero hacerlas al mismo tiempo, soy muy distraída, incluso lo ejemplifico cómo tener la canción de la estrellita de Mario Bross en mi cabeza, así lo expliqué en un TikTok”, relata Rosalba.
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La Organización Mundial de la Salud (OMS), refiere que a nivel mundial existe una prevalencia de trastorno por déficit de atención e hiperactividad (TDAH), de 5%. En México no hay cifras claras respecto a la prevalencia, aunque los últimos datos de la Secretaría de Salud (SSA) que datan del 2017 apuntan a un 5%, pero sólo se toma en cuenta a la población infantil y adolescente.
“Recibir un diagnóstico para mi fue un alivio, así me deje sentir tonta”, explica Rosalba para quien la neurodivergencia (condición donde el cerebro aprende, funciona o procesa la información de manera diferente a la mayoría de las personas) es parte de la vida cotidiana y familiar, su hija Paula vive con el trastorno del espectro autista y TDAH, el hermano de la joven madre y uno de sus primos también están diagnosticados con este último trastorno.
Tipos de tratamiento
El doctor Adolfo Lara Rodríguez, psiquiatra especialista en infancias y adolescencias explica que el TDAH es un trastorno del neurodesarrollo, que tiene una fuerte carga genética y afecta el desarrollo emocional, cognitivo, conductual y social de quien lo padece.
Se le conoce como un trastorno del neurodesarrollo “porque hay una alteración a nivel de la neurotransmisión, en la forma como nuestro cerebro se comunica principalmente en áreas catecolaminérgicas que tienen que ver con la dopamina, que se encargan de ciertos circuitos que están relacionados con la atención y con el control inhibitorio, cuando este está deficiente se genera la hiperactividad, digamos que estas áreas tienen una comunicación por decirlo así disregulada”, explica el especialista.
Lara Rodríguez detalla que existen tres características que definen al TDAH:
- Hiperactividad: nivel superior de actividad.
- Impulsividad: dificultad para controlar la conducta, emociones y pensamientos.
- Inatención: dificultad o incapacidad para concentrarse y prestar atención.
Lara Rodríguez también señala que existen tres tipos de TDAH y su clasificación depende de sus síntomas:
- Hiperactivo-Impulsivo: predomina el ser cambiar de actividades y en ocasiones no terminarlas.
- Inatento:predomina ser distraído, olvidadizo y tener dificultades en seguir instrucciones.
- Mixto: aquí se combina el ser inquieto y distraído.
En la “Guía Clínica del Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad” publicada en el 2019 por la SSA, se estipula que "se debe desarrollar y diseñar adecuadamente un plan de tratamiento comprehensivo, multimodal e individualizado de acuerdo a las necesidades de cada paciente”.
La mencionada guía destaca que “el uso de la psicoeducación es indispensable en todas las etapas del manejo, sin embargo la farmacoterapia es la piedra angular del tratamiento en la mayoría de los casos de TDAH. La decisión de iniciar un tratamiento farmacológico debe ser responsabilidad compartida de los padres, el paciente y el médico".
Por su parte Adolfo Lara Rodríguez, explica que no se debe estigmatizar el tratamiento psiquiátrico y el uso de fármacos para tratar el TDAH, menciona que unos de los medicamentos que se indican en México es el Metilfenidato que es un estimulante de los neurotransmisores y regula la dopamina. Este medicamento “regula la atención sostenida y logra el control inhibitorio”, explica el especialista, agrega que otra opción es la atomoxetina que es una buena opción cuando predomina la inatención.
Las alternativas de tratamiento no farmacológico es la terapia cognitiva que trata de mejorar los procesos de atención. Otra opción, es la terapia conductual que trata de que se mejoren las alteraciones de la conducta como la inquietud psicomotriz.
“Cuando tomó el medicamento me siento mucho más serena y enfocada, me digo a mi misma esta bien sentirse así y de este modo debería sentirme siempre”, explica Rosalba Reyes, que en su tratamiento farmacológico toma Metilfenidato.
La importancia de diagnóstico oportuno
El psiquiatra Adolfo Lara Rodríguez, asegura que un factor que puede influir en el diagnóstico tardío del TDAH es que hay muy poco psiquiatras infantiles, él estima que cada año egresan alrededor de 20 psiquiatras especializados en las infancias, lo que provoca un déficit de especialistas. “Este trastorno tiene una carga importante del factor genético, se estima que es de un 76 por ciento de heredabilidad”, detalla el especialista.
Adolfo Lara asegura que el mecanismo ideal para ser diagnosticado es perder el miedo al estigma y si desde la infancia se diagnostica se puede ayudar a tener un mejor desarrollo y no presentar alteraciones como la ansiedad o trastornos depresivos.
El especialista señala que de no contar con un diagnóstico temprano del TDAH se puede ocasionar: daños en la personalidad, baja autoestima, dificultades en las relaciones interpersonales y dificultades en la escuela o en el trabajo.
La combinación de factores genéticos puede provocar que se presente más de un padecimiento del neurodesarrollo, Paula, la hija de Rosalba es uno de esos casos, está diagnosticada con autismo y TDAH. La niña es hiperactiva pero con trabajo de terapia y han logrado superar algunos síntomas, ahora tiene mejor comunicación verbal, puede ver a su madre a los ojos, ya se relaciona con más niños de su edad y focaliza su atención.
Una actividad que unió a Paula y Rosalba, además se hizo viral en TikTok, fue una manifestación feminista que se realizó en una plaza pública en Nuevo León, donde las manifestantes en su mayoría eran niñas que además de marchar se les involucra en actividades donde se les habla de sus derechos y se les enseña canciones infantiles adaptadas, en una de ellas se canta: “arroz con leche yo quiero encontrar a una compañera que quiera soñar. Que crea en sí misma y salga a luchar, por conquistar sus sueños de más libertad. Valiente sí, sumisa no. ¡Feliz, alegre y fuerte te quiero yo!".
Paula disfrutó la marcha y las actividades, aunque por momentos estaba dispersa su mamá recuerda ese día con mucha alegría e ilusión al ver a su hija conviviendo con más niñas y sosteniendo una pancarta donde se leía: “A las niñas autistas no se nos diagnostica porque sólo se estudiaron niños”. El video tuvo miles de reacciones y cientos de comentarios de mujeres que aún siendo adultas no habían sido diagnosticadas con algún padecimiento neurodivergente pese a tener varios síntomas o como Rosalba fueron diagnosticadas siendo adultas.
“Siento que cómo madre e hija hemos fortalecido mucho nuestro vínculo, ver su avance vale cada peso que pagó por la terapia. Paula es capaz de muchas cosas, me sorprende mucho sus logros, yo celebró que es neurodivergente y para mi es una niña muy resiliente”, comparte entusiasmada Rosalba.
Quitando el estigma y rompiendo paradigmas
Rosalba a trata el TDAH con atención psicológica y psiquiátrica ella sostiene que “la terapia es lo mejor del mundo, puedes entender mucho de tus procesos y poner límites, eso sí debes de trabajar y comprometerte con tus objetivos, pues no es magia, lo que se plática con el terapeuta se debe llevar afuera”.
“Yo soy diseñadora, soy mamá, intentó hacer activismo en el feminismo, campañas para concientizar sobre el autismo y tengo una empresa de aire acondicionado”, así describe Rosalba las múltiples actividades en las que se involucra y destaca que las personas con TDAH soy muy curiosas y pueden hacer más de una cosa a la vez.
“Es importante que a las mujeres se nos diagnostique en los padecimientos neurodivergentes. Muchas veces se cree que la hiperactividad es no estar quietos, cómo lo suelen manifestar los niños pero en las niñas puede ser una hiperactividad mental cómo a mi me pasó” explica Rosalba.
“Los trastornos del neurodesarrollo no son una tragedia, siempre hay solución, yo he visto que aún hay padres que se asustan cuando reciben el diagnóstico de TDAH, pero yo les diría que no satanicen los trastornos del neurodesarrollo y las discapacidades psicosociales”, destaca Rosalba.
“Se tiene que eliminar el estigma y entender que el TDAH tiene un tratamiento y este es benéfico, sin tener efectos adversos y se puede mejorar la calidad de vida de los niños y adultos”, concluye el psiquiatra Adolfo Lara.