Una nueva investigación ha encontrado que el utilizar audífonos podría ayudar a prevenir que la demencia se desarrolle en pacientes mayores que presentan algún tipo de pérdida de la audición, un padecimiento bastante frecuente en la tercera edad.
La pérdida de la audición, así como la demencia, son consideradas unos de los padecimientos más frecuentes entre los adultos mayores, y se ha demostrado que incluso podría existir una relación en su desarrollo y aparición, donde la pérdida de la audición llevaría a aumentar el riesgo de deterioro cognitivo.
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Según indican los expertos, y una Lancet Commission de 2020, se encontró que hasta un 40% de los casos de demencia en el mundo, pueden ser causados o influidos por 12 factores de riesgo específicos, que además podrían ser prevenibles y modificables, para prevenir el deterioro cognitivo.
Dentro de esos factores, explican, se encuentra la pérdida de la audición, que según algunos estudios, como uno publicado en 2019, se encontró que el tratamiento de la pérdida de la audición con aparatos auditivos, estaba asociado con un retraso en el diagnóstico de Alzheimer.
Aparatos auditivos podrían reducir riesgo de demencia
Publicado en The Lancet Public Health, un nuevo estudio ha encontrado que los pacientes adultos en edad media, que utilizan audífonos para tratar su pérdida de audición, podrían experimentar menor riesgo de desarrollar algún tipo de demencia.
Los investigadores utilizaron los datos de más de 400,000 pacientes de entre 40 y 69 años de edad, que estaban incluidos en la base de datos UK Biobank, incluyendo a quienes tenían pérdida auditiva (utilizando o no aparatos auditivos), así como quienes no presentaban este problema.
Se consideró, además, los riesgos que tenían los pacientes de desarrollar algún tipo de demencia por cualquier causa, así como subtipos específicos de demencia:
- Alzheimer.
- Demencia vascular.
- Otra demencia no vascular, ni por Alzheimer.
Gracias a los datos, los autores de la investigación se dieron cuenta de que un aumento en el riesgo de demencia no se observaba en los participantes que tenían una disminución de la audición, pero que sí utilizaban sus aparatos auditivos; y estos efectos “protectores” se demostraron en todos los tipos de demencia.
La soledad y la depresión también disminuyen
Tras analizar la información de los pacientes, se percataron de que los participantes que tenían pérdida auditiva, pero no utilizaban ningún tipo de audífono, tenían un incremento en el riesgo de padecer demencia, si se les comparaba con pacientes sin daños a la audición.
Gracias a estos resultados, los investigadores concluyeron que la pérdida auditiva podría relacionarse con un riesgo del 29,6% de desarrollar demencia.
Los autores también concluyeron que el uso de los audífonos para combatir la pérdida de la audición, reducían este riesgo, debido a que podían influir positivamente en algunos factores que se vinculan al deterioro cognitivo, y podrían causar un daño en el bienestar de los pacientes:
- Reducción del aislamiento social.
- Reducción de la soledad.
- Reducción del estado de ánimo depresivo.
(Con información de: The Lancet Public Health.)