Nadie nos enseña a ser hijos y nadie nos enseña a ser padres o madres. Aprendemos que debemos tener una relación de amor, apoyo, soporte y fortaleza, sin embargo, en algunos casos el enojo y la falta de confianza nos hace darnos cuentas que la relación va más allá de compartir rasgos genéticos. Con el paso del tiempo, aprendemos a comunicarnos, a relacionarnos y a querernos. En algunas etapas, nos cuesta mayor trabajo entendernos y hacer lo correcto, lo que no lastime a la persona.
Aunque el amor entre padres e hijos se considera invencible, en cada etapa de la vida va cambiando. La relación en la infancia y la relación durante la adultez son distintas. Cambiamos con el tiempo y el tiempo nos cambia. Cuando padres y madres llegan a la vejez, hijos e hijas tienen la oportunidad de poder solucionar problemas o distanciarse. ¿Por qué los hijos optan por el distanciamiento familiar? ¿Podemos hacer algo al respecto? Son las preguntas que abordaremos en esta nota.
Te podría interesar
De acuerdo con el Consejo Nacional de Población, el 1950 residían 5 personas mayores (60 años y más) por cada 100 habitantes. En caso de mantenerse esta tendencia, se estima que para 2050, 23 de cada 100 habitantes sean personas mayores. En 2020, en México cerca de 11 millones de hogares estaban habitados por una persona mayor.
¿Qué pasa cuando los hijos abandonan a sus padres ancianos?
Según Psicólogo Emocional Online, las dinámicas familiares pueden propiciar roces, problemas no resueltos y conflictos entre los integrantes, pues cada persona tiene su propia forma de ser y por ello es difícil de congeniar entre todos. Ante esto, existen relaciones que pueden ser más propensas a llevarse mal, provocando que el distanciamiento y dejando de hablar. La distancia se da como respuesta al mantener una relación de cordialidad. MejorconSalud menciona algunas razones por las cuales existe el distanciamiento de hijos a padres:
- Vivencias traumáticas y necesidad de poner distancia: los hijos optan por distanciarse como una forma de sanar las heridas del pasado. En este proceso, se establecen límites saludables para proteger el bienestar emocional
- Migraciones forzadas y distancia geográfica: conflictos armados, persecución política o desastres naturales pueden generar una separación entre padres e hijos debido a la búsqueda de seguridad y una vida mejor. Al igual la distancia geográfica puede deberse para perseguir objetivos profesionales
- Diferencias de valores y discusiones continuadas: hijos buscan el distanciamiento con padres para evitar tensiones y mantener la paz mental
- Conflictos con las parejas y tensiones en la relación: los choques de valores y dificultades pueden desencadenar un distanciamiento gradual
- Hijos con problemas mentales, personalidad difícil o preferencias parentales: si algún integrante vive con un problema de salud mental, tiene un carácter hostil o se da preferencia a un integrante, esto también puede desencadenar el distanciamiento
Entre estas y otras razones, pueden ser la causa de distanciamiento familiar. Para lograr un reencuentro, es necesaria la participación de ambas partes, pues como en toda relación se necesita el compromiso, la responsabilidad y la constancia de las personas para lograr que funcione. Bonnie Cushing, trabajadora social y clínica en Nueva Jersey menciona para AARP que una manera de un primer acercamiento puede ser mediante una nota escrita o un mensaje de voz en el teléfono. La clave está en lograr una simplicidad para demostrar interés en volver a conectar.
En caso de que la persona no esté preparada, madres y padres pueden dejar la puerta abierta para poder mantener el contacto, evitando que las pequeñas ofensas impidan la reconciliación. Al igual, es necesario reducir la expectativas, probablemente el trato no sea el mismo, pero puede mejorarse. Esto requerirá esfuerzo, paciencia y fortaleza.
(Con información de Consejo Nacional de Población, Psicólogo Emocional Online, MejorconSalud, AARP)