Cuando pensamos en la relación entre padres e hijos adolescentes, las primeras imágenes que nos vienen a la mente es la actitud retadora del hijo y la educación restrictiva de padres donde se da espacio para las discusiones, el rechazo y la culpabilidad. Sin embargo, la relación entre padres e hijos adolescentes está construida por diversos matices. A pesar del caos que se presente, hay momentos donde existe una relación de apoyo, comprensión o búsqueda de comunicación a pesar de los retos.
Probablemente padres y adolescentes suelen preguntarse: ¿En qué momento cambió todo? ¿Por qué me culpa de todo? ¿Ya no volveremos a tener una relación sin discusiones? Por ello, hoy hablaremos sobre la culpabilidad y rechazo que suele presentarse durante la adolescencia, así como presentaremos una serie de consejos para poder mejorar la relación. Cabe destacar que esto dependerá de un proceso que requiere compromiso y responsabilidad.
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En Familia informa que los niños y adolescentes que se sientan queridos y apoyados, mostrarán mayor tolerancia, mayor confianza y mayor capacidad para afrontar la adversidad. Por lo cual, serán más capaces de afrontar los cambios que supone el paso de la edad adulta. Ante los cambios presentes, padres podrán ayudarles mediante pautas saludables, conciliadoras y tolerantes.
¿Qué es el rechazo en la adolescencia?
De acuerdo con Centro Eleia, las y los adolescentes atraviesan un duelo en diversos sentidos. Uno de ellos es la relación de sus padres durante la infancia, pues en esa etapa les veían como poderosos, grandiosos y relevantes en su vida, sin embargo, en la adolescencia empiezan a cuestionarlos mediante la crítica, dejando de idealizarlos, lo cual puede provocar sentimientos de enojo, vacío, desesperanza y sentimientos relacionados con la independencia. Eresmamá destaca estos sentimientos pueden presentarse en la culpa de adolescentes hacia padres por diversas razones:
- Sentimiento de estar “fuera de lugar”: el adolescente está en una zona complicada donde puede tomar decisiones, pero siente restricción en sus opciones
- Dificultad para aceptar consecuencias: sienten que no están preparados para asumir responsabilidades y que su libertad no están amplía como desearían
- Acumulación de resentimiento o rencor: se sienten tratados injustamente, guardando sus sentimientos y convirtiéndolos en acusaciones y reclamos
- Dificultad para lidiar con la frustración: cada situación para el adolescente es extremo y urgente
Adolescencia Positiva explica que el rechazo y la culpabilidad también son causa de los cambios cerebrales que adolescentes viven. A pesar de ello, no significa que padres y adolescentes deban esperar que pase esta etapa, sino necesitan buscar un equilibrio donde padres puedan dar esa independencia, pero a la vez adolescentes puedan encontrar un espacio de intimidad y complicidad.
El Colegio Indoamericano recomienda que padres y adolescentes hablen sobre las situaciones difíciles que han atravesado como una manera de verse humanos para lograr una conexión, bajando las idealizaciones en expectativas reales. No sólo significa hablar sobre temas relacionados con la escuela y la familia, también pueden abordarse temas complejos relacionados con la existencia del ser humano. Esto permitirá entenderse, apoyarse y formarse como personas ante ese miedo constante por el futuro.
(Con información de En Familia, Centro Eleia, Adolescencia Positiva, Colegio Indoamericano)