La exposición a sustancias perfluoroalquiladas y polifluoroalquiladas (PFAS, por sus siglas en inglés) podría actuar en el retraso del inicio de pubertad en niñas. A esta conclusión llega la primera investigación longitudinal que incluye el papel que desempeñan las hormonas del retraso, publicada en la revista ‘Environmental Health Perspectives’ y realizado por la Universidad de Cincinnati en Estados Unidos, reporta Infosalus.
“Las exposiciones ambientales durante la pubertad, no sólo a las PFAS, sino a cualquier cosa, tienen un mayor potencial de tener efectos sobre la salud a largo plazo. Lo que han hecho es ampliar la ventana de susceptibilidad y los hace más vulnerables durante un período de tiempo más largo”, menciona Susan Pinney, autora principal del estudio.
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De acuerdo con la Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos, las PFAS están localizadas en una amplia gama de productos para la población, por lo cual, varias personas han estado expuestas. Algunos tipos de PFAS pueden acumularse y permanecer en el cuerpo humano durante un largo tiempo, ocasionando daños perjudiciales a la salud.
¿Qué productos tienen PFAS?
Las sustancias perfluoroalquiladas y polifluoroalquiladas conocidas como PFAS, informa European Environment Agency, son un grupo de más de 4,700 agentes químicos sintéticos ampliamente utilizados a lo largo del tiempo. Suelen denominarse ‘químicos eternos’ debido a su persistencia en el ambiente y el cuerpo. Pueden incidir en daños hepáticos, enfermedad tiroidea, obesidad, problemas de fertilidad y cáncer.
La Agencia para Sustancias Tóxicas y el Registro de Enfermedades añade que las PFAS han sido utilizadas desde la década de 1940 para la fabricación de utensilios de cocina antiadherentes, ropa repelente al agua, telas, alfombras resistentes a las manchas, cosméticos, espumas contra incendios y productos resistentes a grasa, agua y aceite. Por lo cual, se requieren investigaciones sobre los efectos en la salud debido a su exposición.
En este estudio, se analizó sus impactos en la pubertad de niñas. Planned Parenthood explica que la pubertad es una etapa donde el cuerpo atraviesa por diversos cambios para pasar de ser niño/niñas a adulto/adulta físicamente durante un cierto tiempo. Las personas suelen iniciar la pubertad entre los 8 y 14 años. Al ser un proceso, tiene varias etapas y cada cuerpo pasa por una pubertad distinta debido a que cada cuerpo es diverso.
¿Cómo afectan las PFAS a la pubertad?
En la investigación participaron 823 niñas que tenían entre 6 y 8 años al inicio del estudio donde 379 estaban en el área metropolitana de Cincinnati y 444 en el área de la Bahía de San Francisco. Especialistas buscaron iniciar la investigación antes del desarrollo de los senos, posteriormente, se realizaron exámenes cada 6 a 12 meses para ver los primeros signos de desarrollo mamario y vello púbico.
Los resultados arrojaron que el 85% de las niñas tenían niveles de PFAS donde las hormonas por la exposición de PFAS fueron consistentes. Para la exposición PFAS, las y los autores encuentran la relación entre el río de Ohio, principal fuente de agua potable, y una planta de DuPont cerca de Parkersburg, Virginia Occidental. Así como la espuma contra incendios y campo de entrenamiento contra incendios cerca del río.
“El estudio encontró que en las niñas expuestas a PFAS, la pubertad se retrasa 5 a 6 meses en promedio, pero habrá algunas niñas en las que se retrasará mucho más y en otras en las que no se retrasará en absoluto. (…) No sólo necesitamos publicar resultados de nuestra investigación, también hacer todo lo posible para informar a la población general y a la comunidad sanitaria”, expresa Susan Pinney.
(Con información de Infosalus, Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos, European Environment Agency, Agencia para Sustancias Tóxicas y el Registro de Enfermedades, Planned Parenthood)