Muchas personas tienen la costumbre de desayunar huevo, pero ¿puedes comerlo si tienes hígado graso? A continuación, te damos la respuesta.
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La Biblioteca de Medicina de los Estados Unidos señala que el hígado es el órgano más grande del cuerpo y ayuda a digerir los alimentos, almacenar energía y eliminar las toxinas.
La enfermedad por hígado graso es una afección en la que se acumula grasa en el hígado y existen dos tipos principales:
- Enfermedad del hígado graso no alcohólico
- Enfermedad del hígado graso por alcohol, también llamada esteatosis hepática alcohólica.
¿Si tengo hígado graso puedo comer huevo?
El huevo es un alimento rico en proteínas y vitaminas que contiene una clara que está compuesta de agua y una yema que es la que posee la mayor parte de las proteínas y lípidos.
Aunque el huevo aporta muchos beneficios a la salud, existe el debate si las personas con hígado graso deben de consumirlo o no, ya que también contiene calorías y una de las comidas que más se prohíben a las personas que padecen esta enfermedad son las grasas saturadas y los alimentos que generan una alta ingesta calórica. Esto ocurre en todos los alimentos provenientes de animales como la leche y el mismo huevo.
Un huevo contiene alrededor de 200 kilocalorías y unos 500 miligramos de colesterol lo que de primera instancia mostraría que se debe de evitar por completo. No obstante, si se analiza más a fondo, el 70% de esas calorías y grasas provienen de la yema; por ser la parte del huevo que contiene más proteínas es la que más colesterol aporta.
Las personas con hígado graso pueden comer huevo pero de forma moderada
Las personas que padecen hígado graso deben consumir huevo de forma moderada y de igual manera optar por la clara, ya que contiene proteínas saludables para el cuerpo, pero sin las calorías que proporciona la yema.
Lo más recomendable para las personas con hígado graso es que no consuman la yema y que reduzcan su consumo a uno o dos por semana, como máximo.
La dieta es fundamental para las personas con hígado graso
La grasa que rodea al hígado se genera por una mala alimentación y su consecuencia mayor, el sobrepeso. Por lo que cuando una persona padece la enfermedad, la primera acción que debe hacer es comenzar un plan de dieta balanceado y una rutina de ejercicios para eliminar la grasa acumulada en este órgano.
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