El oído es una parte importante del cuerpo humano que nos facilita la convivencia con nuestro entorno y con las personas con las que nos relacionamos día con día. No obstante, muchas veces olvidamos que nuestra audición no es para siempre y debemos cuidarla para conservarla por más tiempo.
A través del foro virtual de Sumédico, el doctor Gonzalo Corvera Behar, quien diagnostica y atiende enfermedades del oído y estructuras conexas que afectan la salud auditiva en el Instituto Mexicano de Otología y Neurotología S.C (IMON), donde también se desempeña como director, mencionó que la reducción de la audición es equivalente a la reducción del núcleo de personas con las que podemos interactuar con el paso de los años.
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"La función de la audición gira alrededor del lenguaje. Lo vemos con los bebes que difícilmente pueden aprender a leer o hablar cuando nacen con algún problema auditivo y en las personas arriba de 50 años que tienen problemas de audición porque tienen más probabilidades de desarrollar Alzheimer en años próximos", informa el especialista.
¿En qué momento debemos realizar un estudio de audición?
De acuerdo con el doctor Corvera existen momentos clave para evaluar la calidad de nuestra audición. Por ejemplo, al nacer se deben diversos estudios para conocer si el infante necesita algún aparato aditivo o tratamiento. Otro examen fundamental se debe hacer entre los cuatro y siete años. A esta edad muchos niños y niñas presentan afecciones como la otitis media cerosa que reduce la audición, no obstante, si se detecta a tiempo es tratable.
Otro momento para realizar un estudio es cuando el infante está teniendo problemas de aprendizaje. Si un niño tiene problemas para hablar con otros niños debemos de checar la audición. “Es un error no checar los problemas de audición de un infante cuando se le dificulta entender las indicaciones, porque más que un déficit de atención, puede tratarse de un problema de audición”, enfatiza el especialista Corvera.
El cuarto momento es terminando el bachillerato y el quinto a los 45 años, edad promedio en la que muchas personas comienzan a perder audición de forma significativa. El último momento es cuando existe alguna menor duda de pérdida auditiva.
“Cuando escuchas cosas raras en los oídos como zumbidos, cuando no escuchas bien lo que te dicen en lugares ruidosos o cuando hablas con alguien y piensas que se come las palabras es momento de acudir con un especialista”.
Hábitos nos ayudan a proteger nuestros oídos
De acuerdo con el especialista, algunos de los hábitos fundamentales que podemos tener para cuidar nuestros oídos son:
- No meterse nada a los oídos. Los cotonetes son algunos de los objetos que debemos evitar
- Mantén los oídos secos, no húmedos
- Limita la exposición del ruido ambiente y el uso de audífonos, pues las personas en ciudades pierden más audición que las de campo por todo el ruido al que están expuestas
- El límite laboral de exposición a ruidos es de 80 decibeles por ocho horas de trabajo. Procura no rebasarlos para cuidar tus oídos
- No fumar. La gente que fuma pierde más la audición que la que no
- Cuidar el azúcar en la sangre
Por último, el especialista detalla que no hay que esperar a que haya molestias en nuestros oídos para ir a una revisión con un especialista. Si consideras que presentas síntomas de pérdida auditiva lo mejor es consultar a un especialista.
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