De acuerdo con la Secretaría de Salud (SSa), los tumores de próstata y de testículo se presentan usualmente en los extremos de la vida: el primero aproximadamente a los 60 años y el segundo entre los 18 y 35 años. Ambos tumores se encuentran dentro de los primeros cinco sitios de las patologías oncológicas en México, detalla.
Estadísticas del Instituto de Estadística y Geografía (INEGI) señalan que en México el cáncer de próstata es la principal causa de muerte por tumores malignos en hombres mayores de 60 años segundo del tumor maligno de tráquea, bronquios y pulmón.
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Por otro lado, 4,500 mexicanos desarrollan cáncer de testículo al año, siendo la población de hombres entre 15 y 35 años de edad la más afectada, señala la SSa.
Tumores de próstata y testículo, prevención y autoexploración
Expertos de Mayo Clinic detallan que el cáncer testicular es una proliferación de células malignas que comienza en los tejidos de uno o ambos testículos. El primer signo de este cáncer suele ser una protuberancia o bulto en uno de los testículos. A menudo se diseminan de esta zona a otras partes del cuerpo.
El cáncer de testículo, señala la SSa, no causa molestias en etapas iniciales, lo que es necesaria la autoexploración mensual a partir de los 18 años y detectar cualquier protuberancia o inflamación entre órgano.
Por su parte, el cáncer de próstata, de acuerdo con la Sociedad Americana del Cáncer, se origina cuando las células del cuerpo comienzan a crecer en forma descontrolada dentro de la próstata, glándula que produce parte del líquido que conforma el semen. Esta se encuentra debajo de la vejiga y delante del recto.
Este tipo de cáncer puede no provocar signos ni síntomas en sus primeros estados. De hecho, algunos hombres de edad avanzada que mueren por otras causas muestran signos de este tipo de cáncer en las autopsias y ni siquiera sabían que lo habían desarrollado.
¿Dónde puedo acudir para tratarme?
Aquellas personas que no cuentan con seguridad social pueden acudir a centros de salud u hospitales de la Secretaría de Salud federal o de sus respectivas entidades para ser atendidos. La atención especializada de esta enfermedad corresponde a las áreas de oncología y urología.
Los pacientes que son sometidos a estudios de ultrasonido y análisis de sangre para determinar marcadores tumorales, tomografía y radiografía de tórax. Estos estudios permiten conocer el tipo de tumor y su grado de avance, por lo que hacer estos chequeos de forma constante ayudan a prevenir y tratar con antelación un posible cáncer.
(Con información de Secretaría de Salud, Inegi, Mayo Clinic, Sociedad Americana del Cáncer).