¿A poco no, pocas cosas se comparan con la sensación de envolverse en una toalla suave y limpia después de un baño? Pero cuando esa toalla huele a humedad, el momento puede volverse desagradable y este problema es más común de lo que parece y, aunque suele atribuirse al simple hecho de no secarlas bien, la realidad es que hay varios factores detrás del mal olor.
De acuerdo con Ecología Hoy, la humedad se refiere a la cantidad de vapor de agua presente en el aire o en una prenda y cuando una toalla no logra secarse completamente- ya sea por el clima, por estar guardada en el baño o porque se mojó de nuevo-, se convierte en el ambiente preciso para que hongos y bacterias se propaguen.
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El sitio The Spruce señala que estos microorganismos se desarrollan con facilidad en ambientes cálidos y húmedos, provocando ese olor desagradable tan característico; a eso se suman otros factores, como la acumulación de residuos de piel muerta, cremas, aceites o acondicionadores, que se adhieren a las fibras y agravan el problema. ¡Nada agradable!
¿Cómo evitar que las toallas huelan a humedad?
- Sécalas al sol o en un lugar ventilado después de cada uso
- Si te bañas por la noche, cuélgalas en un área donde la humedad no sea persistente
- Evita guardarlas en el baño o clósets húmedos, ya que el encierro favorece la proliferación de hongos
- Lava tus toallas con frecuencia, sobre todo si las usas a diario.
El truco para eliminar el mal olor
Si tus toallas tienen ese mal olor característico, sí hay una solución sencilla y natural: el vinagre blanco destilado es un aliado poderoso gracias a su acidez natural, que neutraliza los malos olores y elimina bacterias.
- Mezcla una taza de vinagre blanco con agua tibia
- Remoja las toallas durante al menos 30 minutos
- Luego, lávalas en la lavadora per no utilices suavizante
- Tiéndelas al sol para que se sequen
Si el problema persiste o vives en una zona fría y húmeda, La Tercera recomienda usar cápsulas absorbentes de humedad para mantener tus textiles secos y frescos por más tiempo.
Con este trucos- económicos y naturales-, tus toallas no solo recuperarán su frescura, sino que también evitarás la proliferación de hongos y bacterias que pueden afectar tu piel.
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