El bicarbonato de sodio es un producto de limpieza natural y versátil que puede usarse para una variedad de tareas en el hogar, incluyendo el blanqueamiento de cortinas. Aunque no lo creas, este método natural es una alternativa más segura y ecológica a los blanqueadores químicos agresivos, que pueden dañar las telas y ser irritantes para la piel de las manos.
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Beneficios del bicarbonato de sodio
El bicarbonato de sodio o bicarbonato sódico, es un producto muy versátil y ampliamente utilizado que no puede faltar en el hogar. Ecología Verde señala que este es un compuesto inorgánico que tiene un aspecto de polvo fino y blanco inodoro, soluble en agua y alcalino.
Las propiedades que presenta el bicarbonato de sodio pueden ser aprovechadas para la salud y bienestar, o para las tareas del hogar, como blanquear las cortinas, limpiar artículos de plata, utensilios, ropa, azulejos, grifería entre otros. También ayuda a limpiar la piel, tratar la caspa y absorber los malos olores de las cañerías e incluso destaparlas.
Cómo usar el bicarbonato de sodio para blanquear las cortinas
Para blanquear tus cortinas y que estas obtengan un color blanco pulcro, te contamos cómo puedes preparar una mezcla para lograrlo, de acuerdo con el portal Semana.
Materiales:
- Bicarbonato de sodio
- Agua tibia
- Un balde grande
- Vinagre blanco (opcional)
- Detergente para ropa (opcional)
Instrucciones:
Primero, debes llenar un balde grande con agua tibia. Agregar una taza de bicarbonato de sodio por cada cuatro litros de agua y mezclar bien hasta que el bicarbonato se disuelva por completo. A esta mezcla se puede agregar una taza de vinagre blanco para aumentar el poder blanqueador. Si las cortinas están muy sucias, también se puede agregar una cucharada de detergente para la ropa.
Después, introducir las cortinas en la solución de bicarbonato de sodio y asegurarse de que queden completamente sumergidas. Dejar que las cortinas se queden remojadas durante al menos dos horas o toda la noche para obtener mejores resultados.
Pasando este periodo de tiempo, retira las cortinas de la solución y enjuagarlas bien con agua fría hasta eliminar cualquier residuo de bicarbonato de sodio. Lava las cortinas en la lavadora con el detergente habitual y ciclo de lavado normal para luego colgarlas al aire libre o secarlas en la secadora con un ciclo de calor suave.
Verás que tus cortinas quedan impecables y blancas usando esta técnica.
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