Es bien sabido que a las niñas y niños les encanta bailar y mover el cuerpo. El baile no solo es una actividad deportiva, también es una actividad artística y lúdica. A través del movimiento, las infancias se divierten y se sienten más activas; mejoran su salud y su relación con otras personas.
Cabe mencionar que todos estos beneficios también son relevantes para niñas y niños con necesidades especiales. Por tal motivo, queremos que conozcas la terapia de baile especializada para infantes con autismo.
Te podría interesar
¿Qué es el trastorno del espectro autista?
Mayo Clinic explica que el trastorno del espectro autista (TEA) es una afección relacionada con el desarrollo del cerebro, que interviene en la forma como una persona percibe y socializa con otras. Esto puede traer problemas de comunicación o interacción social.
Hasta el momento no existe un tratamiento único para este trastorno, dado que el término “espectro” indica que hay un gran abanico de síntomas y niveles de gravedad del mismo.
Frente a esto, es importante que las personas alrededor del infante tengan un abordaje holístico de la situación que le permita desarrollarse al máximo desde diferentes áreas. Les así que la terapia de baile ha mostrado ser eficaz para intervenir de forma positiva en el autismo.
¿Cómo es la terapia de baile para niñas y niños con autismo?
La American Dance Therapy y Association (ADTA) define la “danzaterapia” como un método psicoterapéutico que usa el movimiento para integrar a las personas que lo toman de forma física, emocional, social y cognitiva. Surge en la década de 1940 y funciona como herramienta creativa para potenciar el desarrollo de las infancias autistas en distintos niveles.
Los beneficios son múltiples y ha sido utilizada para combatir dificultades clínicas y educativas. El TDAH y el Síndrome de Down, junto a otras condiciones de diversidad funcional, pueden ser abordadas con este método para lograr importantes avances cognitivos en las infancias.
¿Qué beneficios tiene la danzaterapia?
Las infancias con autismo suelen tener dificultades para expresarse o comunicarse con otros; les cuesta trabajo leer algunas señales corporales y, en muchas ocasiones, su lenguaje puede ser limitado. En este sentido la danza mejora el conocimiento corporal y la precisión de los movimientos; favorece la coordinación de las extremidades y estimula la motricidad fina.
La danza también les ofrece a las niñas y niños con autismo la posibilidad de manifestar sentimientos, emociones e ideas, y acercarse a otras personas; relacionarse mejor con el entorno y captar los estímulos del ambiente que les rodea. La percepción auditiva, visual, táctil y kinestésica se estimula gracias a la danza.
Otros beneficios que tiene la “danzaterapia” son:
- Ayuda a reducir la inquietud y agresividad
- Influye positivamente en la falta de atención
- Reduce los niveles de estrés y ansiedad
- Aumenta el estado de ánimo y si autoestima
- Permite que haya un recurso de expresión y conexión con otras personas
- Permite expresar su ser interior y su sentir de forma cómoda
Sin duda, la terapia de baile proporciona las herramientas físicas, emocionales, sociales y cognitivas para aumentar la autonomía de las infancias con autismo, mejorando su calidad de vida.
(Con información de: Mayo Clinic, ADTA)