Main logo

¿Tu hijo no balbucea ni hace gestos a los 2 años? Podría ser autismo

El Trastorno del Espectro Autista (TEA) se caracteriza por alteraciones en la interacción social, comunicación y actividades repetitiva

Escrito en OPINIÓN el

El Trastorno del Espectro Autista (TEA) se caracteriza por alteraciones en la interacción social, comunicación y actividades repetitivas que comúnmente se manifiestan en los primeros dos años de vida; el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) promueve la detección oportuna y cuenta con especialistas para valorar e iniciar tratamiento y terapia dependiendo cada caso.

El TEA son alteraciones afectan la manera en la que una persona percibe y socializa con otras, lo que causa problemas en la interacción social y la comunicación. Actualmente, se utiliza el término “Espectro” para referirnos a un amplio abanico de síntomas y gravedad.

¿Cuáles son los síntomas de una persona con autismo?

Los niños suelen presentar síntomas de autismo desde el primer año de vida. Un número reducido parece desarrollarse de forma normal en el primer año y luego pasa por un periodo de regresión entre los 18 y 24 meses de edad, cuando aparecen los primeros síntomas de autismo.

(Foto: Freepik)

Un niño o un adulto con TEA puede tener intereses, actividades o patrones de comportamiento repetitivos y limitados, presentar síntomas como:

  • realizar movimientos repetitivos
  • balancearse
  • girar o aletear con las manos
  • realizar actividades que podrían causarle daño
  • desarrollar rutinas o rituales y alterarse con el mínimo cambio
  • tener problemas de coordinación
  • realizar movimientos extraños al caminar
  • manifestar un lenguaje corporal rígido o exagerado

Algunos:

  • son más sensibles a la luz, el sonido o el contacto físico
  • indiferentes al dolor o a la temperatura
  • no participan en juegos de imitación o simulación
  • se obsesionan con un objeto o actividad con más intensidad o concentración a las normales
  • tener preferencias específicas respecto a los alimentos, entre otras manifestaciones

Con el paso del tiempo, el TEA provoca problemas para desenvolverse a nivel social, como  en la escuela y otros entornos.

Los signos de los trastornos se observan en retrasos evidentes en habilidades del lenguaje y las interacciones sociales, por lo que es importante que ante la sospecha o preocupación del desarrollo de los hijos, se comenten las inquietudes al médico de primer contacto, el Médico Familiar, general o pediatra.

Aunque no existe una prueba de laboratorio o gabinete para realizar el diagnóstico del Trastorno del Espectro Autista, el médico puede recomendar pruebas de desarrollo para determinar un posible retraso en las habilidades cognitivas, el lenguaje o sociales. 

(Foto: Freepik)

Entre las manifestaciones se puede observar que los niños:

  • No responden con una sonrisa o una expresión de felicidad a los 6 meses o antes  
  • No imitan sonidos o expresiones faciales a los 9 meses o antes
  • No balbucean ni hace gorgoritos a los 12 meses o antes
  • No hacen gestos, como señalar o saludar a los 14 meses o antes
  • No dicen palabras simples a los 16 meses o antes
  • No participa en juegos de simulación o imitación a los 18 meses o antes
  • No dice frases de dos palabras a los 24 meses o antes
  • Pierde las habilidades del lenguaje o sociales a cualquier edad

El IMSS cuenta con Neuropediatras y Paidopsiquiatras que valoran la necesidad de tratamiento farmacológico; especialistas en comunicación humana para brindar la terapia de lenguaje y ocupacional, así como psicólogos que brindan terapia conductual. 

Los tratamientos para atender el TEA se pueden agrupar en diferentes categorías, entre ellas: Programas Conductuales, de Educación y Aprendizaje, así como medicamentos.

A medida que maduran, algunos niños con este trastorno pueden socializar más con otras personas o mostrar menos alteraciones del comportamiento; generalmente los que tienen problemas menos graves, con el tiempo pueden llevar una vida relativamente normal o casi normal; sin embargo, la mayoría, sigue teniendo dificultades con el lenguaje o habilidades sociales