Las uvas son frutas deliciosas, con dulzura natural y una textura jugosa que las hace perfectas para disfrutar en cualquier momento del día. Las comemos en ensaladas, postres e incluso en las fiestas de fin de año. Pero, ¿sabías que las uvas también pueden ser un snack ideal antes de dormir? Este pequeño fruto tiene propiedades que ayudan a mejorar el descanso y la calidad del sueño, lo que las convierte en una opción perfecta para la noche.
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¿Por qué las uvas ayudan a dormir mejor?
Fibra. El sueño está íntimamente relacionado con el microbioma intestinal, que desempeña un papel crucial en la regulación de los ritmos circadianos, los ciclos naturales de sueño y vigilia. Como apunta Consumer Reports, los alimentos ricos en fibra, como las frutas y verduras, tienen un impacto positivo en el microbioma intestinal, lo que puede influir en la calidad del sueño. Consumir suficiente fibra puede ayudar a mejorar tu descanso nocturno, y las uvas son una excelente fuente de esta fibra beneficiosa.
Melatonina. Las uvas también son una fuente natural de melatonina, una hormona clave para regular los ciclos del sueño. Estudios han demostrado que consumir alimentos ricos en melatonina, como las uvas, puede aumentar los niveles de esta hormona, lo que facilita la conciliación del sueño. Esto es especialmente útil para aquellas personas que tienen dificultades para dormir o mantener un sueño profundo.
Polifenoles. Además de la melatonina, las uvas contienen polifenoles como el resveratrol, que se encuentran principalmente en la piel de la fruta. Estos compuestos tienen efectos positivos sobre el sistema nervioso autónomo, lo que se asocia con un aumento de la variabilidad de la frecuencia cardíaca, un factor relacionado con la relajación y la mejora de la calidad del descanso. También se destacan por sus propiedades antiinflamatorias y neuroprotectoras, que benefician no solo el sueño, sino la salud en general.
¿Cuántas uvas comer para dormir bien?
Las uvas son una excelente opción para el descanso nocturno, pero es importante consumirlas con moderación. Su alto contenido de agua y azúcar natural puede causar molestias estomacales o picos de glucosa si se comen en exceso, lo que es especialmente importante para personas con diabetes.
Según UCLA Health, una porción pequeña de alrededor de 16 uvas es ideal para disfrutar de los beneficios de esta fruta sin comprometer tu digestión. Comer más de esta cantidad podría causar acidez o irritación estomacal, lo que podría interferir con el sueño.
Si decides incluir uvas en tu rutina nocturna, Healthline recomienda consumirlas temprano por la noche, alrededor del atardecer. De esta manera, aprovechas los efectos de la melatonina y los antioxidantes presentes en la fruta justo antes de acostarte, lo que favorece un sueño reparador. ¡Dulces sueños!
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