Cristian von Schulz-Hausmann, es médico cardiólogo y desde hace más de 20 años, se dedica a la industria farmacéutica donde ha enfrentado distintos retos, como ir a la vanguardia en el desarrollo de nuevos y mejores tratamientos y participar en estrategias que permitan que estas opciones terapéuticas estén al alcance de quienes lo necesitan.
“En términos generales, el tema del acceso a nuevos tratamientos siempre es una discusión, pero es algo que no tendríamos por qué discutir en ningún país, aunque desafortunadamente la normativa va más atrasada que la innovación médica y se terminan generando tensiones”, afirma en entrevista con Sumédico.
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Este especialista detalla que la industria y la salud pública deben encontrar la mejor forma de que los tratamientos puedan ser abordados para que, de alguna manera, lleguen a la gran mayoría de la población que la necesita.
“Ese siempre es un desafío que va a estar permanentemente, pero habrá que encontrarse con nuevas herramientas para poder llevarlos adelante”, asegura.
El doctor Schulz-Hausmann, cuenta que en el año 2000 comenzó un momento muy interesante en la industria farmacéutica, pues empezaron a aparecen nuevos fármacos muy desarrollados y avanzados, lo que trajo la necesidad de trabajar mucho más desde la parte médica con el conocimiento propio en las nuevas moléculas y sus mecanismos de acción.
“Aparecieron nuevos tratamientos en oncología, esclerosis múltiple y diabetes, pero tratamientos más avanzados requieren de un conocimiento más fuerte y se requiere de la comunidad científica, así como de un diálogo mucho más profundo con la comunidad médica varios años antes de que se desarrolle en el mercado un producto; fue así que la industria farmacéutica me buscó”, relata.
Antes de ese año, detalla el médico, había mucha producción de medicamentos químicos para tratar enfermedades totalmente relevantes, pero que no recaían tanto en el conocimiento de un médico con alta formación.
Innovación médica destaca en la oncología
Estar en la industria le resultó muy interesante, señala el experto, pues es un desafío estar 5 años adelante en poder entender lo nuevo que va a salir en tratamientos médicos donde, dice, que la oncología lleva una gran ventaja.
“Creo que la oncología es uno de los puntos más críticos en la innovación médica, porque los mecanismos de acción de los viejos medicamentos que se utilizaban versus los que hoy tenemos, muestran una enorme diferencia”, detalla.
Según el también director general de Merck México, hoy tenemos medicamentos donde prácticamente el propio sistema inmune termina combatiendo al cáncer.
También en diabetes han habido grandes avances, sobre todo para entender cómo afecta la enfermedad, la importancia de tratarla y de encontrar estrategias para prevenir su desarrollo a corto o largo plazo.
“La prevención es otro desafío muy interesante tanto en México como en el mundo”, subraya.
“Rápidamente la medicina me atrapó”
El médico cardiólogo relata que la decisión de ser médico surgió desde que tenía apenas 16 o 17 años, aunque en ese momento tenía más interés por dedicarse a temas relacionados con enfermedades mentales, especialmente en la rama de la psiquiatría.
“Descubrí que los psiquiatras eran médicos, así que empecé a trabajar en ello; me metí a estudiar medicina a mis 17 años y rápidamente esta profesión me atrapó, mucho más la medicina de urgencias, principalmente la emergencia cardiovascular”, recuerda.
Poco a poco, el doctor Schulz-Hausmann empezó a tratar más temas relacionados con la reanimación cardiopulmonar y la concientización de la sociedad para tratar de salvar vidas en el momento más catastrófico. A su vez, eso contribuyó a que se acercara a distintas actividades que estaban relacionadas con los cuidados intensivos y con la cardiología.
“Conocí a otros médicos que eran cardiólogos y me llamó mucho la atención, fue así que abandoné mi idea original y terminé dedicándome a la cardiología”, cuenta el especialista.
Trabajó durante muchos años como cardiólogo en distintas actividades tanto en cuidados intensivos como medicina ambulatoria y otras subespecialidades que tiene la cardiología. Después siguió con una carrera asistencial y de investigación clínica y 10 años después comenzó su carrea en la industria farmacéutica.
“Empecé en esta apasionante área de la salud donde se relacionan la atención clínica con la investigación médica de vanguardia, así como la toma de decisiones en términos de cómo ayudamos desde la industria a mejorar los indicadores de salud pública”, asegura.
El doctor también estudió una carrera en investigación clínica y economía de la salud, así como una maestría en la Universidad de Harvard. En sus estudios también se enlista un máster en Administración de Empresas.
Avanzar con nuevas terapias y educar a otros médicos, los principales retos
En la carrera de un médico hay muchos retos, dice el experto, como lidiar contra el reloj y contra la urgencia, específicamente en cuidados intensivos. Otro reto es que cada paciente es algo único, una situación nueva que puede ser un desafío interesante.
Pero sin duda uno de los retos más importantes es avanzar con las nuevas terapias y tratar de ver cómo se puede educar al resto de los médicos para poder realizar los tratamientos en el momento correcto y, sobre todo, con la dosis correcta y mantener a los pacientes en tratamiento hasta que lo terminen.
“Muchos médicos conocemos bien algunos medicamentos y nos cuesta más tomar la innovación, porque requiere de otro tipo de compromisos, acciones y conocimiento, pero una vez que los tomamos, a veces tampoco cumplimos con las dosis necesarias o el tiempo de tratamiento en los pacientes, muchas veces porque estamos ante enfermedades crónicas”, lamenta Schulz-Hausmann.
Industria y sector salud deben trabajar juntos
Desde la perspectiva del especialista, la industria farmacéutica y los decisores en los sistemas de salud deben necesariamente trabajar juntos para abordar los nuevos problemas, que surgen porque la medicina tiene un alto costo, no solo a nivel del tratamiento, sino también de herramientas diagnósticas y de lo que significa la innovación.
“Todos tenemos que trabajar con una mirada diferente, con un enfoque más de economía de la salud, de cuáles son los tratamientos más efectivos al costo más razonable posible y donde veamos de qué va a hacerse cargo cada uno para generar la ecuación más factible y que todos los pacientes reciban los tratamientos”, apunta.
Los retos de acceso siempre van a estar presentes, no van a tener una resolución, asegura el cardiólogo, sino que van a evolucionar en el tiempo porque la medicina está avanzando a pasos tan agigantados que se pone en tensión el sistema.
En términos de prevención siempre hay cosas para hacer en conjunto y desde la industria farmacéutica el experto asegura que buscan relacionarse con el ámbito público y privado para poder hacer actividades de prevención y concientizar.
“Principalmente, nos relacionamos con médicos y pagadores para facilitar la educación médica entre pares, pero también tenemos la responsabilidad de introducir nuevos tratamientos en el mercado y ser quienes brindemos toda la información necesaria para que el médico, con el mejor conocimiento, decida el tratamiento ideal”.
Lo importante, destaca el director de Merck, es que el paciente siempre está en el centro y todos deben trabajar con el mismo objetivo: darles salud.
Nuevos medicamentos evitan los tratamientos permanentes
De acuerdo con el experto, hay enfermedades a las que claramente debemos prestarles más atención por su alta prevalencia en México, como la diabetes, la obesidad y las enfermedades relacionadas a la tiroides.
“Enfermedades como el cáncer de mama están teniendo mucha concientización en las mujeres, en términos de prevención, pero debemos atender otros padecimientos también como el cáncer de colon”, enfatiza.
El doctor menciona que a lo largo de su carrera en la industria farmacéutica ha participado en el lanzamiento de nuevos tratamientos para esclerosis múltiple que evitan a los pacientes tener una medicación permanente y ser tratados en etapas muy cortas, a veces algunas semanas. Después de eso, queda libre de su enfermedad hasta en un 80% al menos por 5 años.
En cáncer, Cristian von Schulz-Hausmann también ha participado en tratamientos innovadores, especialmente en cánceres raros pero altamente mortales y que afectan a las personas mayores, como el cáncer de piel, de vejiga y renal.
“Ha habido enormes progresos, ya no se usa un medicamento que destruye las células cancerosas, sino tratamientos que activan el sistema inmune del paciente para que destruya estas células”, detalla.
Generar un medicamento seguro y eficaz es una emoción muy fuerte
Desde el punto de vista médico, el experto señala que tiene muy grabados los momentos en donde un paciente en estado crítico finalmente es dado de alta o cuando un paciente con un trasplante cardíaco puede tener una vida normal.
“Son momentos muy claves para la vida de un cardiólogo, esa atención que hace la diferencia entre la vida o la muerte. Son momentos críticos y que finalmente se pueda resolver es algo irrepetible. Cada caso es único, no puede compararse con otra, cada vida humana es muy valiosa”, dice orgulloso.
En la industria farmacéutica, poder impactar en un paciente real que necesitaba de una solución terapéutica y poder ver ese tratamiento desde la fase de investigación clínica, la evidencia y que finalmente está en el mercado, es sin duda otro de los momentos en donde el doctor asegura que encuentra una emoción muy fuerte.
Además, destaca que generar un medicamento que sea seguro y eficaz para la población, que esté en el momento adecuado con la calidad precisa en el paciente que lo necesita para seguir viviendo, es una responsabilidad muy grande pero también un momento de mucha emoción.
“Escuchar que el paciente tuvo el beneficio de la salud gracias al medicamento que viste nacer es inigualable, me pasó en casos de diabetes, esclerosis múltiple y de enfermedades de tiroides. Vale todo saber que el paciente se encontró con un medicamento que terminó dándole la tranquilidad que buscaba”, concluye.