INFECCIONES DE TRANSMISIÓN SEXUAL

“El mundo no se acaba con VIH; se puede tener calidad de vida con una ITS”

Las infecciones de transmisión sexual son una realidad, sin embargo, pacientes continúan enfrentándose ante las carencias de los servicios de salud debido a diagnósticos bajo estigmas y violaciones a los derechos humanos

Las personas con una Infección de Transmisión Sexual pueden vivir una vida plena, pero los estigmas en los servicios de salud disminuyen esta posibilidad.
Las personas con una Infección de Transmisión Sexual pueden vivir una vida plena, pero los estigmas en los servicios de salud disminuyen esta posibilidad. Créditos: Canva
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‘Limitado y carente’ son las palabras que Diego utiliza para describir a la educación sobre salud sexual dada en México. Recuerda que, en sus años educativos, el tema ‘era tratado con pinzas’ y cuando se hablaba sobre Infecciones de Transmisión Sexual (ITS), se enseñaba bajo estigmas. Al formarse como especialista de salud, su conocimiento fue mayor.

A las y los futuros profesionales se les enseñaba en los espacios universitarios que el paciente debía tratarse con respeto, empatía y cuidado, sin embargo, cuando Diego recibió su diagnóstico de Virus de Inmunodeficiencia Humana (VIH) fue estigmatizado, rechazado y vulnerado.

Diego no es su nombre verdadero. Es un seudónimo elegido para proteger su identidad, pues Diego reconoce las discriminaciones que puede vivir si sus colegas y pacientes conocen sobre su diagnóstico de salud. Y no sólo lo reconoce, también lo vivió al ser despedido de su anterior trabajo por ser un ‘foco de infección’. Tras un año de su diagnóstico y meses de tratamiento, cuenta para SuMédico las discriminaciones que viven las personas diagnosticadas con una ITS y las carencias de los servicios de salud.

“Como profesional de salud debes tener el tacto, la empatía de decirle a una persona que tiene tal enfermedad. Ese diagnóstico puede darte esperanza o puede hundirte en ansiedad y depresión”, menciona Diego.

En México se registran más de 220 mil casos de VIH

Según el informe de Sistema de Vigilancia Epidemiológica de VIH, en México desde el año 1983 hasta el primer trimestre de 2023, se han registrado 355, 969 casos de VIH. Actualmente, 227,378 son los casos notificados de VIH que se encuentran vivos conforme a su estado de evolución registrado. La tasa de mortalidad respecto al 2020 por 100 mil habitantes fue de 3.50.

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En el marco de conmemoración del Día Mundial de la Salud Sexual celebrado el 4 de septiembre, Daniel Orendain, especialista en psicología y acompañante en educación y salud sexual, desmitifica los mitos sobre las ITS y la salud sexual desde su diagnóstico con Virus del Papiloma Humano y como profesional de la salud

Por su parte, Edson Morales, voluntario en ‘Fuera del Closet’, una asociación civil que ofrece educación y acompañamiento a personas de la comunidad LGBTTTIQA+ en el Estado de México, detalla los retos que tienen las instituciones para hacer una realidad los derechos humanos más allá del marco jurídico que tiene el país.

De acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), en México, poco más del 50% de la población se autoidentifica LGBTTTIQA+. El Estado de México es la entidad federativa que cuenta con el mayor número de personas parte de esta comunidad siendo 489, 594 habitantes.

¿Qué se entiende por salud sexual?

La Organización Mundial de la Salud (OMS) define a la salud sexual como un aspecto para la salud y el bienestar de las personas, las parejas y las familias, así como para el desarrollo económico y social de las comunidades y los países. Esto bajo un enfoque positivo y respetuoso respecto a la sexualidad y las relaciones sexuales sin coerción, discriminación o violencia. Sin embargo, Daniel Orendain, considera que salud sexual abarca más allá de un bienestar, por ejemplo, los recursos económicos, recursos políticos, prácticas sexuales, acceso a servicios de salud, entre otros, que tiene una persona.

“Tenemos la noción de que la salud es la ausencia de enfermedad, pero tenemos que hablar de otros espectros. La sexualidad no sólo es el cuerpo, sino abarca quiénes somos. La salud sexual estará definida por mi identidad de género, mi organización sexual, mis expresiones de género, mis expresiones afectivas, románticas, eróticas, entre otros”, señala. 

Ante la exclusión de estos elementos, la salud sexual ha sido un tema enfocado a las relaciones sexuales. MedlinePlus detalla en su portal que los factores que pueden afectar a la salud sexual es temor a un embarazo no deseado, preocupaciones sobre la infertilidad, enfermedades de transmisión sexual, enfermedades crónicas como cáncer o enfermedades del corazón y medicamentos que afectan al deseo sexual y rendimiento. Daniel Orendain explica la salud sexual más allá de un acto, pues la salud sexual está presente en distintas etapas de la vida:

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  • Bebés: abarca necesidades fisiológicas, necesidades físicas, necesidades emocionales y procesos fisiológicos. Cuidadores podrían mencionar por qué están tocando tal parte del cuerpo y realizar este tocamiento con acercamiento afectivo
  • Niñez: fomentar el autocuidado y la autodefensa, así como el cuidado personal y el cuidado colectivo ante las violencias a las que infancias se les ha vulnerabilizado 
  • Adolescencia: comienzan cambios notorios, como la primera menstruación (menarquía), la primera eyaculación (espermaquia), procesos de erotismo, compartir procesos de erotismo, conocimiento sobre métodos de planificación y prevención del embarazo
  • Adultez: construcción de la familia si lo deseamos, construcción de la autonomía sexual, construcción del trabajo, entre otras complejidades
  • Vejez: nos volvemos a encontrar con cambios fisiológicos, como la menopausia, la andropausia, procesos de abandono y cuidado sobre placer y erotismo

“Estos procesos se repiten y fortalecen. Lo que aprendí cuando era bebé, también me sirve en mi vida futura. Toca abrir canales para que las personas podamos acceder a esto que definimos como salud, acompañamiento y educación sexual”, puntualiza Daniel Orendain.

¿Cuál es la diferencia entre una ITS y ETS?

La Organización Panamericana de la Salud informa que se conocen más de 30 bacterias, virus y parásitos diferentes que son transmitidos mediante el contacto sexual. Las ITS pueden tener diversas consecuencias para la salud, como síntomas en los genitales, complicaciones en el embarazo, infertilidad, aumento en la probabilidad de transmisión de VIH y efectos psicosociales. Por lo cual, se busca dar un tratamiento adecuado y fortalecer los sistemas de vigilancia.

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“Las ITS son un riesgo que nos atraviesa a todos sin importar la edad, género, expresión de género, identidad de género, contextos, entre otros elementos. Hablamos sobre un proceso de infección porque hay vías específicas de transmisión por lo cual implementamos métodos de prevención para bloquear o intervenir”, explica Daniel Orendain.

Hasta la fecha, remarca Daniel Orendain, existen dos métodos de barrera que sirven para las ITS: los condones externos e internos y la abstinencia. Más allá de la decisión sobre si deben usarse o practicarse, permiten a las personas el elegir. Al igual, se pueden integrar métodos de cuidados, como vacunas, pruebas rápidas y pruebas de chequeo, sin olvidar el acceso a la información. Para entender porque son ITS y no Enfermedades de Transmisión Sexual, Daniel Orendain explica lo siguiente:

“Cuando presento signos de infección, no quiere decir que estoy enfermo, pues hablar de enfermedad involucra otros procesos sobre cómo actúa mi cuerpo. En una infección sí puedo salir de mi cama, sí puedo trabajar y puedo cuidar a mi familia. Probablemente presentemos episodios donde no podamos salir de la cama por tristeza, decepción o depresión, pero no por enfermedad. La enfermedad involucra otros procesos de mi cotidianidad”, subraya Daniel Orendain, quien agrega que algunas ITS pueden evolucionar a Enfermedad de Transmisión Sexual.

“Saliste VIH positivo, no te podemos atender aquí porque revisamos tu número de seguridad social y no tienes vigencia de derechos”

Diego acudía 2 veces al año a centros de salud para realizar sus exámenes de detección de ITS. Al tener un diagnóstico negativo, accedió a ser donante de sangre para su tía a quien próximamente le realizarían una operación. En junio de 2022 acudió al Instituto Mexicano del Seguro Social para hacer la donación correspondiente. Tras llenar los documentos solicitados, realizar las entrevistas necesarias y hacer la donación, Diego fue a recoger sus análisis en compañía de sus familiares, entre ellos, su hermana. 

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“Cuando voy por los resultados, me piden pasar al área de Epidemiología. Desde ahí comencé a sentir incertidumbre, comenzó a sonarme raro. Me dirigen al área de infectología y decido pasar solo. Esperé aproximadamente 20 minutos en la sala de espera. Sin la mínima empatía, tacto o delicadeza, el doctor correspondiente me dijo: ‘saliste VIH positivo, no te podemos atender aquí porque revisamos tu número de seguridad social y no tienes vigencia de derechos. Tienes que realizarte una prueba confirmatoria para comenzar tratamiento, pues estás en una situación temprana’. Después de eso, comenzó a realizarme preguntas y se dirigió hacia mí utilizando términos médicos.”

Como profesional de salud, Diego sabía que el médico tuvo que explicar qué era el VIH, por qué pasaba, cuál iba a ser el tratamiento, etc., pero nada de eso pasó. Ante la reacción del médico, Diego decidió interrumpirlo. “Soy profesional de la salud, conozco la terminología que está empleando y sé cómo funciona la enfermedad”. El médico respondió “bueno, ya lo sabes, ya no te tengo que decir nada”. Al salir del consultorio, Diego dobló el resultado en varias partes. Su hermana le preguntó qué había pasado al ver su semblante, pero Diego no quiso hablar del tema.

Se supone que hay una Norma Oficial Mexicana la cual habla sobre las ITS. No importa a dónde vayas, tienen que atenderte y después referirte a la unidad que te corresponde. Al llegar a ese momento, estando desempleado por más de un año, pensé que me iba a morir. Sabía que la ciencia había avanzado, pero le tenía miedo al estigma.”

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Al llegar a su casa, Diego comenzó a buscar sobre la ITS. Aunque estaba en ayunas por la donación de sangre, indago en internet sobre el tratamiento, los posibles efectos a largo plazo y las medicinas disponibles. Al pasar unas horas, la hermana de Diego volvió a insistir para hablar sobre lo qué había pasado, fue ahí cuando Diego eligió hablarlo.

“Solté el llanto, le expresé que no me quería morir. Ella me respondió: ‘Vas a estar bien, hay muchas personas que viven con ello. Y voy hacer lo posible por ayudarte’. Después del resultado caí en ansiedad y depresión, hasta el día de hoy sigo en tratamiento psicológico y algunas veces todavía me cuesta trabajo asimilarlo”, expresa Diego.

El VIH, informan los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades, es un virus que ataca el sistema inmunitario del cuerpo. Si no se trata puede causar SIDA (Síndrome de Inmunodeficiencia Adquirida). Hasta el momento, no hay una cura eficaz, sin embargo, con atención médica, puede controlarse. Las personas que reciben un tratamiento eficaz pueden tener una vida larga y saludable, así como proteger a sus parejas.

 “El VIH es un virus con una conducta específica. Entra por vías de transición que comúnmente tiende a ser el torrente sanguíneo ante prácticas eróticas. Recorre el torrente sanguíneo y ahí entra en contacto con las células rojas, comportándose como una célula impostora que comienza a invadir el sistema inmunológico, disminuyendo los glóbulos rojos y dejándonos vulnerables. La persona puede comenzar con tratamiento antirretrovirales que le ayudarán a tener un estado indetectable y continuar su erotismo”, menciona Daniel Orendain.

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Al conocer el diagnóstico, Diego habló con sus parejas sobre sus resultados, pero estas le respondían culpabilizando su ITS. Con el paso del tiempo, Diego decidió mudarse de Acapulco a Ciudad de México para recibir atención médica en la Clínica Especializada Condesa, un centro de salud que ofrece tratamiento integral a personas con diagnóstico de VIH mediante atención médica y acceso a medicamentos antirretrovirales. Diego recuerda que la atendió una persona llamada Verónica quien le transmitió la empatía necesaria para que al cabo de unas horas estuviera en camino hacia Ciudad de México.

“Es muy diferente el servicio, te atienden primero y dejan los trámites para después. Me hicieron estudios y confirmaron mi diagnóstico. En ese momento tenía 51 mil copias lo cual hablaba de que apenas la infección iba empezando. Me explicaron el tratamiento, qué efectos secundarios iba a atravesar. Inicié el tratamiento y lo continué siendo sumamente estricto, al cabo de un mes el número se redujo a 1 copia. Cuando tienes debajo de 40 copias, ya no puedes transmitirlo”, explica Diego.

“Eres un foco de infección para los pacientes y tus compañeros”

Después de unos meses, Diego consiguió trabajo en la Asociación Mexicana de la Cruz Blanca Neutral, I.A.P., un hospital pediátrico, por lo cual pudo acceder a un seguro en el IMSS. En mayo de 2023, Diego presentó un dolor de garganta que no cedía a pesar del consumo de antibióticos. Por ello, Diego decidió pedir permiso para acudir a la “Unidad de Medicina Familiar, Clínica IMSS 17 Legaria”, ubicada en la Alcaldía Miguel Hidalgo, para acceder a una cita médica.

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Al llegar, Diego relata que fue recibido con estigmas. Servidores del centro de salud violaron su privacidad al compartir el diagnóstico de VIH entre las personas que se encontraban presentes. Después de estar 3 horas, fue dirigido al “IMSS Hospital General de Zona 48 S. Pedro Xalpa” ubicado en la Alcaldía Azcapotzalco. Diego obtendría su cita 15 días después. Los permisos continuaron y Diego lo atribuía al dolor de garganta hasta que un día decidió compartir su diagnóstico con sus jefes.

“Cuando le comenté a la directora médica, la noté preocupada por mí. Expresó que para ella no dejaba de ser un humano quien era excelente en su trabajo. Me prometió darme su apoyo para los permisos que necesitara. Tres días después me mandaron a la oficina administrativa, me estaba esperando el abogado y me dijo: ‘por tus preferencias y por ser una persona con VIH, no puedes estar aquí. Eres un foco de infección para los pacientes y tus compañeros’. Ahí me di cuenta que la vida era injusta por estar infectado, como ellos lo dicen, me estaban despidiendo.”

“Se puede tener una excelente calidad de vida teniendo una ITS

Hoy, Diego continúa aprendiendo a vivir con VIH. La falta de un trabajo, un ingreso económico y los estigmas que continúan en el sector salud, lo han puesto en una posición vulnerable, sin embargo, ha encontrado apoyo. Un ejemplo es VIHve Libre, un programa permanente de apoyo comunitario para personas con VIH.

VIHve Libre le ha proporcionado ayuda psicológica, medicamentos y acompañamiento que durante todo este tiempo Diego necesitaba, pero se le negaba. Así como VIHve Libre, existen otras asociaciones civiles que hacen frente las discriminaciones para personas LGBTTTIQA+ y personas diagnosticadas con alguna ITS o ETS, por ejemplo, ‘Fuera del Clóset’.

"Fuera del Closet es una asociación civil la cual lleva 13 años trabajando a favor de los derechos de las personas LGBTTTQA+."

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Así la identifica Edson Morales, quien lleva más de un año desempeñándose como voluntario y siendo parte de jornadas de salud, talleres, acompañamiento e incidencia política dentro de instituciones gubernamentales, como en las calles desde dicha A.C.

‘Fuera del Closet’ surgió siendo parte de un proyecto académico de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la Universidad Autónoma del Estado de México, donde Ricardo Torres y Ernesto Montes de Oca, quienes fungen como presidente y secretario respectivamente, realizaron un programa de radio hablando sobre las violencias que vivía la comunidad LGBTTTIQA+ en los espacios universitarios.

Al paso del tiempo, Ricardo Torres y Ernesto Montes de Oca, se percataron que hablar sobre la discriminación era una parte de las acciones que podrían realizar, por lo cual decidieron conformarse como una asociación civil. Por el momento, están trabajando en 6 labores para incidir y exigir políticamente sobre los derechos de las personas LGBTTIQA+. Edson Morales las detalla a continuación

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  1. Capacitación: mediante pláticas y talleres a cualquier persona que lo solicite mediante Facebook, Instagram, X, Threads y TikTok
  2. Educación y cultura: realizamos actividades para sensibilizar a la población mediante exposiciones de fotografía, obras de teatro o foros de discusión
  3. Asesoramiento: ofrecemos acompañamiento y canalización dependiendo de los casos, pues no podemos trabajar en todas las demandas debido a nuestra ética, por lo cual les acercamos con profesionales
  4. Incidencia política: buscamos la participación política en el Estado de México desde adentro de sus instituciones gubernamentales hasta nuestra participación en las calles
  5. Investigación: realizamos colaboraciones con medios de comunicación para hablar sobre diversos temas, a la par, realizamos investigación académica donde  generamos informes, como el que entregamos a la Comisión de Derechos Humanos en el Estado de México

“Respecto a las ITS, organizamos jornadas de salud donde aplicamos pruebas rápidas de VIH bajo el asesoramiento de personal que está capacitado y sensibilizado para comunicar un diagnóstico. No sólo es dar la noticia, también es dar seguimiento a los primeros días de reacción y brindar la información necesaria para acudir a lugares donde puedan recibir tratamiento, como el Centro Ambulatorio para la Prevención y Atención de SIDA e Infecciones de Transmisión Sexual (CAPASITS) o la Clínica Especializada Condesa”, destaca Edson Morales.

Aunque por el momento Fuera del Closet no tiene un lugar físico establecido, mediante diversas dinámicas apoyan a una comunidad constantemente vulnerada.

Desde las diversas labores que realiza Fuera de Closet y sus años incidiendo en los derechos humanos, identifican diversos retos que la población mexicana, especialmente la población mexiquense, continúa enfrentándose para hacer una realidad la salud sexual, el respeto a las personas diagnosticadas con alguna ITS y las personas LGBTTTIQA+.

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“Uno de los primeros retos es el seguro social. Varias personas no tenemos acceso a uno por lo cual recurrimos a consultorios privados o aquellos pertenecientes a farmacéuticas. Esta problemática es mayor cuando eres una persona LGBTTTIQA+ o tienes una ITS. Nos enfrentamos el prejuicio constantemente, existe una culpabilidad por las condiciones médicas que vivimos cuando diversos factores influyen.”

Edson Morales agrega que en ocasiones las asociaciones civiles deben estar insistiendo para obtener amparos que permitan a las personas recibir sus tratamientos. Otros factores que Edson Morales identifica son la información y la educación, pues al faltar o privarse de su acceso, las personas reproducen estigmas lo cual se visibiliza en una atención poco humanitaria en los centros de salud.

“Se puede tener una excelente calidad de vida con alguna ITS. El trabajo está en formarnos bajo estas temáticas a pesar de no vivir con ellas, pues en algún momento podemos brindar esa información a quien lo necesite, como enfermeras, trabajadores sociales y personas en el sector salud, con el fin de hacer frente a nuestros estigmas y prejuicios.”

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La discriminación que han detectado Diego, Edson Morales y Fuera del Closet, continúan en prácticas y discursos utilizados en el sector salud para hablar sobre ITS. Esto también queda reflejado en términos que actualmente continúan utilizándose al dar un diagnóstico o tratamiento. Daniel Orendain los explica de la siguiente manera:

  • Contagio: esta palabra genera pánico en las personas, por lo cual, comienzan a realizarse aislamiento, rechazo y discriminación
  • Limpieza: lo escuchamos cuando nos estregan nuestros resultados y nos dicen “vas a estar limpio”, pero no toman en cuenta si tengo limpias las manos, tengo las uñas sucias o diversos aspectos relacionados con mi higiene. Aquello que está en mi sangre no me convierte en una persona sucia. Las ITS no tienen suciedad, al contrario, el tema que se involucra es la higiene sexual
  • Población de riesgo: nos ponen una etiqueta en la frente de que somos un riesgo para la población, pero cuanto analizamos quiénes somos las personas que vivimos con una ITS, comenzamos a conocer sobre el poco o nulo acceso de sistemas de salud. Entonces, el término acorde es ser población prioritaria

 “El mundo no se acaba con VIH”

Bajo el propósito de sensibilizar y promover la sexualidad como un aspecto humano y un elemento de salud reproductiva que debe ser satisfactorio, saludable y sin riesgos a la población, la Asociación Mundial Salud Sexual (AMSS) estableció el 4 de septiembre como Día Mundial de la Salud Sexual, de acuerdo con la Comisión Nacional de Protección Social en la Salud.

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Diego recomienda a todas las personas realizarse chequeos médicos y conocer más sobre las ITS. Aunque el desconocimiento y el estigma lo posicionaron en una situación vulnerable, cada día aprende a vivir con VIH. Cada día, lleva registro de sus medicamentos y continúa con terapia psicológica para hacerle frente a la ansiedad y depresión. Ahora su reto es volver a integrarse al sector salud sin ser discriminado.

“Edith Gonzáles decía ‘el mundo no se acaba con el cáncer’, pues yo digo ‘el mundo no se acaba con VIH’. Tienes que aprender a amarte a ti mismo. El VIH me ha enseñado a ser más selectivo con mis amistades y a manejar mi situación. Con la ayuda de VIHve Libre y el acompañamiento de personas experimentadas, he continuado. De repente tengo miedo, pero cuando volteo hacia atrás, me doy cuenta lo que logrado pasar”, expresa Diego.

Por su parte, el especialista en psicología, educación sexual y acompañamiento sexual, Daniel Orendain apuesta por el cambio de paradigma en la medicina. Aunque especialistas de salud pueden tener capacitación e información sobre el cuerpo y patógenos, existe una carencia respecto a la educación sexual integral donde abunda la prohibición del placer y la desinformación.

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“Necesitamos más acompañamiento, no sólo recibir un diagnóstico. Necesitamos que nos acompañen al recibir nuestros resultados, que nos digan qué va a pasar, cómo va a cambiar nuestro día a día y cómo podemos atender esos cambios. Necesitamos amplitud de conocimiento, empatía y sensibilización tomando en cuenta quiénes somos y las violencias que vivimos. Hablando sobre disfrutar nuestra sexualidad con placer, con menos culpas y menos castigos”, puntualiza Daniel Orendain.

Para finalizar, Edson Morales rescata el papel que tienen las, los y les acompañantes tanto asociaciones civiles, como círculos cercanos. No sólo tomando en cuenta cómo poder ayudar, sino desde dónde ayudar y cómo poder lograrlo, abarcando limitaciones y formando alianzas.

“Es necesario continuar creando alianzas tanto a nivel federal, como a nivel estatal. Desde el sector público hasta el sector privado donde podamos contribuir al acceso a tratamiento y acompañamiento. La prevención es relevante mediante campañas de sensibilización y políticas públicas para cada tipo de población. Esto con el fin de ampararnos en caso de solicitarlo. Tenemos que derribar todos esos perjuicios que nos continúan rodeando”, expresa Edson Morales.

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(Con información de  Sistema de Vigilancia Epidemiológica de VIH, Instituto Nacional de Estadística y Geografía, Organización Mundial de la Salud, MedlinePlus, Organización Panamericana de la Salud, Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades, Comisión Nacional de Protección Social en la Salud)