CÁNCER

Esta molécula de azúcar podría afectar la respuesta de la quimioterapia

Un tipo de glucosa podría incidir en el desarrollo del cáncer, según nuevo estudio. Conocer más podría dar pauta a fármacos y tratamientos para dicha enfermedad

Conocer sobre esta glucosa podría dar nuevas alternativas para tratamientos.
Conocer sobre esta glucosa podría dar nuevas alternativas para tratamientos. Créditos: Canva
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Una forma de glucosa podría estar relacionada al desarrollo del cáncer y resistencia a la quimioterapia. Dicho tipo de azúcar, mejor conocido como O –GlcNAc ahora es relacionado con el cáncer y resistencia a la quimioterapia. Así mencionan investigadores del Centro Oncológico Integral Lombardi de la Universidad de Georgetown (Estados Unidos) en su estudio publicado en la revista ‘Nature Chemical Biology’. Su vinculación se podría deber a la construcción de moléculas de ADN.

“Saber que las células cancerosas suelen crecer rápidamente y necesitan más glucosa que las células normales para reprogramar su metabolismo ha motivo clave para poner en marcha este último esfuerzo de investigación bajo la esperanza de que podamos comprender mejor cómo podemos combatir el cáncer a nivel celular o incluso subcelular”, menciona Huadong Pei, autor de la publicación reporta Infosalus.

La Organización Panamericana de la Salud informó que en 2021 a nivel mundial existieron 20 millones de nuevos casos de cáncer. Se prevé que el cáncer aumente aproximadamente en un 60% durante las siguientes dos décadas lo cual podría afectar a sistemas de salud, personas y comunidades. Para 2040, se espera que la carga mundial aumente a 30 millones de nuevos casos donde el mayor crecimiento será producido en países de ingresos bajos y medianos.

¿Qué es el cáncer y cómo se produce?

El cáncer, según National Institutes of Health, es una enfermedad que puede comenzar en cualquier parte del cuerpo donde las células se multiplican sin control y se diseminan a otras partes del cuerpo. En condiciones normales, las células humanas se forman y se multiplican para formar células nuevas a medida que el cuerpo las necesita. Cuando las células envejecen o se dañan, mueren y las células nuevas las remplazan.

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National Institutes of Health explica que a veces este proceso no sigue dicho orden y las células anormales o las células dañadas comienzan a formarse y multiplicarse cuando no deberían. Dichas células forman bultos de tejido, también conocidos como tumores. Estos tumores pueden ser cancerosos (malignos) o no cancerosos (benignos). Cuando los tumores con cancerosos, pueden invadir otros tejidos cercanos, así como viajar a otras partes del cuerpo. Este proceso es conocido como metástasis. Si los tumores son benignos, no hacen metástasis.

American Cancer Society detalla que las células cancerosas pueden desarrollarse a través de múltiples cambios en la genética relacionados con estilos de vida, genes heredados o exposición a ciertos agentes cancerígenos del entorno. En muchos casos, no suele haber una causa que sea evidente. Al igual destaca que existen dos categorías principales de cáncer: tumores sólidos y hematológicos. Los primeros son los tejidos formados y los segundos hacen caso a los glóbulos sanguíneos.

¿Por qué O –GlcNAc podría relacionarse con el cáncer?

“Desde hace tiempo, mi laboratorio explora los mecanismos de señalización celular y transcripción del ADN por lo que el metabolismo celular cambia en respuesta a señales ambientes y genéticas con el objetivo de diseñar estrategias para tratar el cáncer y otras enfermedades”, comparte Huadong Pei.

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El estudio comenzó cuando él y sus colegas estudiaron cómo los nutrientes de las células se alimentan para mantenerse vivas. Ante esto, provocan modificaciones en las proteínas como resultado de la adición del azúcar O –GlcNAc. En una serie de experimentos pudieron determinar que una enzima llamada PRPSQ podría ser clave para influir en la evolución del cáncer.

“Nos gustaría desarrollar fármacos que pueden utilizarse para hacer el cáncer de pulmón sea más sensible, o responda mejor, a la radioterapia y la quimioterapia ya que la resistencia a estas terapias sigue siendo demasiado frecuente. Aún queda mucho camino por recorrer”, menciona el especialista.

(Con información de Infosalus, Organización Panamericana de la Salud, National Institutes of Health, American Cancer Society)