En el marco del simposio de la Academia Nacional de Medicina de México, que preside el doctor Germán Fajardo, los especialistas coincidieron en que se debe tratar los diferentes tipos de cáncer como un problema de salud pública, para el cual se debe generar políticas públicas, un registro nacional y un plan de control.
El simposio titulado "Abordaje del cáncer desde la salud pública" fue realizado de manera colaborativa entre la Sociedad Mexicana de Oncología y la Academia Nacional de Medicina, donde el recién nombrado director del Instituto Nacional de Cancerología, el doctor Oscar Arrieta Rodríguez coordinó la sesión.
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Arrieta Rodríguez propone una estrategia para el control del cáncer con base en diferentes abordajes de atención en el país, que comprende cinco puntos: diagnóstico temprano, tratamiento, priorización de atención, recursos humanos e investigación.
"Es necesario generar una agenda de control de cáncer en el país", señaló Oscar Arrieta Rodríguez.
El recién nombrado director del INCan, habló del concepto de la toxicidad financiera del cáncer, señalado que este se refiere al elevado costo de los casos de cáncer que a decir del especialista "cuestan a las economías de 12 países en Latinoamérica un total de 4,200 millones de dólares por año, incluidos los costos médicos y la pérdida de productividad laboral".
Abordaje del cáncer desde la salud pública
La doctora Yelda Aurora Leal Herrera habló sobre el primer registro de pacientes en Mérida.
Por su parte la doctora Laura Torecillas, habló sobre "la necesidad de Protocolos a nivel nacional de diagnóstico y tratamiento del cáncer", destacando algunos puntos que se requieren para los protocolos Técnicos en Cáncer, mencionando las siguientes necesidades:
Armonizar el mejor manejo del cáncer,optimizar recursos económicos y técnicos nacionales, adaptar a nuestra realidad económica y de desarrollo en salud, garantizar el manejo estandarizado nacional, ypermitir el acceso universal del tratamiento en las instituciones.
La doctora Laura Torrecillas concluyó que se debe "diseñar un programa transversal que pueda ser aplicable a todas las instituciones del Sistema Nacional de Salud de México que funja como un mecanismo de coordinación interinstitucional para definir prioridades y consolidar las acciones y los recursos destinados al ciclo de atención del cáncer en el país".