¿Alguna vez te has preguntado qué pasa si no lavamos nuestras verduras y frutas antes de consumirlas? Darle un tratamiento de lavado a nuestros alimentos nos permite evitar la proliferación de microorganismos infecciosos como la salmonela, la listeria o la Escherichia coli, de acuerdo con La Sexta.
Especialistas señalan que cuando no lavamos nuestras verduras las bacterias que contienen pueden multiplicarse y provocar síntomas como diarrea, vómitos y otros malestares al ingerirse.
Microorganismos en los vegetales
Una de las enfermedades más comunes relacionadas con el consumo de vegetales mal lavados es la Toxoplastosis. Se trata de una enfermedad infecciosa de baja gravedad causada por un parásito llamado Toxoplasma gondi que puede tener graves consecuencias para grupos de riesgo como infantes, mujeres y personas gestantes y personas adultas mayores.
La mayoría de las personas infectadas con este parásito no presentan síntomas o suelen ser similares a la gripe. La mayoría de estas infecciones no necesitan tratamiento, no obstante, es necesario desinfectar correctamente los alimentos para evitar que este parásito tenga repercusiones negativas en el organismo, señala Mayo Clinic.
Desinfecta y lava correctamente tus verduras
La crisis sanitaria provocada por el covid-19 acentuó la necesidad de reforzar nuestras medidas de cuidado no solo personal, también la necesidad de cuidar aún más lo que ingerimos y cómo lo hacemos.
Para desinfectar correctamente la lechuga, alimento versátil y socorrido por muchas personas para incluir en sus desayunos, comidas y hasta cenas, puedes seguir los siguientes pasos.
Antes de iniciar, es importante lavarte adecuadamente las manos. De acuerdo con la Secretaría de Salud, debes lavar tus manos con agua y jabón antes de preparar o consumir cualquier alimento además de tallar con jabón y cloro todas las superficies y equipos usados en la preparación de alimentos.
El siguiente paso es sumergir las hojas en agua fría por uno o dos minutos y añadir unas gotas de desinfectante para alimentos que venden en tiendas convencionales por cinco minutos.
También puedes emplear otros desinfectantes naturales como agua oxigenada, vinagre, limón o bicarbonato de sodio y dejar que hagan efecto junto con la lechuga por 10 o 15 minutos aproximadamente. Estos desinfectantes además de ser antimicrobianos también tienen la capacidad de modificar el pH de los alimentos, indica Cocinavital.
Después de haber transcurrido el tiempo de desinfección, se debe escurrir la lechuga en un colador y dejar secar. Desecha las hojas que estén oscuras o dañadas antes de servirlas. Puedes usar papel destraza para secar más rápido esta verdura.
(Con información de La Sexta, Secretaría de Salud, Mayo Clinic, CocinaVital).