La esponja de trastes es un elemento fundamental en la cocina y es que nos permite eliminar los residuos de comida en platos, vasos, cubiertos, ollas y sartenes, para que queden limpios y relucientes. Sin embargo, no siempre pensamos en la importancia de desinfectar la esponja para evitar acumulación de bacterias.
Debido a que suele estar húmeda y se quedan residuos de comida, es fácil que en la esponja se formen bacterias dañinas que luego podemos esparcir en los trastes, poniéndonos en riesgo de infecciones.
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Por ello, es fundamental desinfectar la esponja de trastes, estropajo, fibra, cepillos y todos los artefactos que se usan para lavar los trastes al menos una vez por semana. Adicionalmente, debemos sustituir la esponja por una nueva cada mes para evitar que se acumule la suciedad.
Desinfectar la esponja de trastes es muy fácil y no necesitas mas que un par de ingredientes caseros que seguro tienes en tu alacena. Toma nota de este truco efectivo que dejará las esponjas relucientes.
Truco para desinfectar la esponja para lavar trastes
Lo primero es que después de usar la esponja retires el exceso de agua y jabón así como los posibles restos de comida, luego debes hacer lo siguiente:
- Con jabón líquido para trastes lava la esponja bajo el chorro de agua y enjuaga hasta que ya no salga espuma. Exprime y deja que se seque sobre una rejilla o si es posible, directamente bajo los rayos del sol.
- Para desinfectar, haz una mezcla de una cucharada de bicarbonato de sodio con ¼ de taza de vinagre blanco.
- Sumerge la esponja seca en la mezcla y deja reposar por al menos 10 minutos.
- Lava una vez más la esponja con jabón para trastes y pon a secar
- Listo, ya es ideal para la limpieza de tus trastes sin riesgo de bacterias peligrosas
Recuerda que además de desinfectar la esponja por lo menos una vez a la semana, debes tener la precaución de cambiarla por una nueva una vez al mes.
¿Por qué debes desinfectar las esponjas para trastes?
El portal especializado Mejor con Salud detalla que la humedad y las microgrietas en este material lo convierten en un hogar perfecto para bacterias dañinas como E. coli. Salmonella o Campylobacter, entre otras.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), este tipo de bacterias pueden causar enfermedad diarreica y otras complicaciones graves como gastroenteritis. Las infecciones pueden ser leves, pero en algunas personas y en los niños, podrían ser mortales.
Los ambientes húmedos son los favoritos para que las bacterias proliferen con más facilidad, sobreviviendo hasta por dos semanas.
Cuando lavas los trastes son esponjas contaminadas, muchos de los microorganismos dañinos se diseminan, lo que eleva el riesgo de infección. Por ello, es fundamental remplazarlas de forma regular, o bien, usar algunas fórmulas para mantenerlas limpias.
(Con información de Mejor con Salud, Gastrolab)