Durante la infancia, es común ver que las y los niños tienen una relación más estrecha con uno de los padres, en especial la madre. Este fenómeno, conocido coloquialmente como “mamitis” tiene una explicación, pues no se trata de un rechazo al padre, sino que el infante está pasando por una etapa de su vida donde la madre es la única persona que le hace sentir totalmente segura o seguro.
En la infancia la madre suele ser una figura de apego por la cantidad de tiempo que las y los niños pasan con ella. No obstante, también necesitan un poco de ayuda para confiar en otras personas, sin forzarlo.
¿Por qué hay más preferencia en querer estar con mamá?
Según con Etapa Infantil, para las infancias la madre es todo su mundo, ya que la necesitan para caasi cualquier cosa durante sus primeros meses de vida. Conforme van creciendo empiezan a ser más independientes, pero para algunos infantes es complicado desapegarse de la figura materna.
Existe una gran conexión emocional que hace que la o el niño se sienta más seguro y protegido cuando está con la mamá. El tiempo de crianza y el vínculo emocional temprano pueden influir en la preferencia de las infancias por su madre, más que con el padre.
Es importante señalar que la preferencia por la madre no significa que las y los niños no quieran a su padre. El vínculo con el padre dependerá del nivel de involucramiento que tenga en la crianza, cuidado y atención con el infante.
Algunas de las razones por las que el infante prefiere estar con su madre, de acuerdo con Ser Padres, son:
- La llegada de un hermano puede descolocar su mundo. El único método que conocen para llamar la atención es dejar que todos sus cuidados recaigan únicamente en manos de la madre
- Si la madre ha estado en casa y se incorpora al trabajo también puede provocar apego hacia ella
- Otros cambios menos drásticos, como una mudanza o una cuidadora nueva, pueden hacer que esto ocurra
¿Qué podemos hacer durante este periodo de apego?
Lo primero que debes tener en cuenta durante esta etapa es paciencia y entender que es un proceso en el que tu infancia está aprendiendo a relacionarse con otras personas que no son sus padres. No le obligues a tener independencia si no está preparada o preparado.
Por tales motivos, es necesario que le permitas tener independencia a través del juego para que se vaya dando cuenta de sus posibilidades y poco a poco supere su fase de “mamitis”.
(Con información de Etapa infantil, Ser Padres).