Existen varias razones por las cuales a la gente le gustan las relaciones íntimas casuales. Mientras que hay personas que no conciben intimar físicamente con alguien que no conocen o simplemente no comparten algún tipo de conexón emocional, las personas que si lo prefieren no funcionan de la misma forma. Te contamos.
Las personas que prefieren las relaciones íntimas casuales simplemente se sienten más cómodas con la idea de tener un encuentro coital con alguien que no necesariamente las mantiene unidas emocionalmente. Puede que solo les haya gustado alguien y simplemente llegaron al acuerdo mutuo de tener algo físico y nada más.
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¿Qué ocurre en las relaciones íntimas actuales?
Según la revista GQ, un estudio realizado hace un par de años por profesores de la Universidad de Binghamton, Nueva York, e investigadores del Instituto Kinsey de la Universidad de Indiana, Estados Unidos, reveló que tener relaciones casuales con otra persona puede considerarse una fuente de intimidad, más que solo un acto físico.
De esta forma, el medio anteriormente mencionado explica que el estudio reveló que las personas que tenían relaciones íntimas casuales buscaban cierto grado de cercanía y romance, frente a las personas que preferían tener relaciones sexuales en una relación comprometida.
En este mismo sentido, Claudia Fouilloux y Virginia Barragán del Departamento de Psiquiatría y Salud Mental de la Facultad de Medicina de la UNAM, en entrevista con Fundación UNAM, explicaron que llevaron a cabo un pequeño estudio basado en entrevistas a jóvenes de entre 18 y 22 años de edad de la institución, para conocer cómo son las relaciones íntimas casuales de los “millennials”.
¿El resultado? Tanto hombres como mujeres reportaron haber tenido relaciones íntimas casuales o abiertas en las que no necesariamente existía una relación de noviazgo o exclusividad.
Es necesario cuidarse al tener relaciones íntimas casuales
Cabe mencionar que pertenecer a un grupo de personas (dispuestas a tener relaciones íntimas casuales o no), no es malo, cada quien decide cómo vivir su vida sexual, no obstante, no olvidemos que eso conlleva tener la responsabilidad de cuidarte a ti misma o mismo, así como a la otra persona.
Sé consciente de lo que buscas, lo que quieres y lo que la otra persona quiere en esos encuentros casuales es importante y, en caso de no llegar a acuerdos tampoco forzarlos. Disfruta de tu sexualidad.
(Con información de GQ, Fundación UNAM)