No querrás volver a sentarte a ver la televisión. Estudios recientes revelaron que existe un mayor riesgo de padecer demencia si pasas horas sentado frente al televisor. El estudio analizó la evolución durante una década de 150 mil personas de 65 años.
El seguimiento a miles de personas mayores muestra que aquellos que ven más la televisión tienen más probabilidades de sufrir demencia. En cambio, conductas menos pasivas como utilizar la computadora, se vincula a un cambio positivo en la salud mental.
Ver televisión ¿Cómo influye en la demencia?
El estudio fue publicado por la revista Proceedings of the National Academy of Sciences, en el que se aclara que la demencia no esta relacionada con el sedentarismo sino con las actividades que se realizan mientras se está sentado.
Los datos de los participantes del estudio, fueron obtenidos de una imponente herramienta de salud pública (la base de datos británica UK Biobank).
Durante la prueba completaron una serie de cuestionarios para saber cuál era su actividad física y el tiempo que pasaban sentados, ya fuera viendo la televisión o ante el ordenador (excluidas las horas de trabajo).
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Mente sana en cuerpo sano
Estudios científicos han acumulado suficiente evidencia para afirmar que la salud mental se encuentra vinculada a la actividad física, en específico cuando el deterioro cognitivo cede ante el proceso de envejecimiento.
Anteriormente especialistas en Neurociencias señalaban la conexión entre sedentarismo y demencia, sin embargo, es el primer estudio que corrobora esta relación.
Una reciente investigación sobre Estilos de vida saludables y más años de vida sin demencia realizada con miles de estadounidenses mostró como el ejercicio físico aparecía relacionado con una menor incidencia del alzhéimer.
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La investigación también destacó los beneficios de hacer tareas cognitivas exigentes como parte de una dieta para un buen envejecimiento cerebral.
Combatir el envejecimiento cerebral
Según datos de la Organización Mundial de la Salud, el alzhéimer y otras demencias afectan a cerca de 50 millones de personas en todo el mundo, alrededor del 5% de la población mundial de edad avanzada. Todo indica que las cifras irán en aumento debido al aumento de la esperanza de vida y el envejecimiento.
Las neurocientíficas del Centro Alemán para las Enfermedades Neurodegenerativas, realizaron imágenes cerebrales a 2 mil 500 personas que llevaban un acelerómetro para registrar su actividad física.
Descubrieron que aquellos que realizaban más ejercicio físico tendían a tener un mayor volumen en áreas críticas como el hipocampo (el área cerebral dedicada control de la memoria).