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5 métodos para detectar leucemia en niños

Este tipo de cáncer suele presentarse en la población infantil

Escrito en ESPECIALIDADES el

La leucemia es el cáncer más común en niños y adolescentes, pero la leucemia linfocítica aguda es la más común en los niños específicamente. ¿Conoces los métodos más usados para detectarla?

Si el médico tiene sospechas de que un niño padece de leucemia realizará algunos exámenes para confirmar su diagnóstico. El médico encargado de realizarlas es el oncólogo pediátrico, un especialista en el tratamiento de cáncer infantil. 

A continuación, presentamos las pruebas más usadas para detectar leucemia en niños, con información de la American Cancer Society.

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1. Análisis de sangre

Estas son las primeras pruebas que se realizarán para la detección. Usualmente se toman de una vena del brazo, pero si los niños son pequeños la sangre puede tomarse de otras venas de los pies o de una punción en el dedo.

Si un niño tiene leucemia tendrá muchos glóbulos blancos y muy pocos glóbulos rojos y plaquetas

“Muchos de los glóbulos blancos de la sangre serán blastos, un tipo de células jóvenes que normalmente se encuentra sólo en la médula ósea. Aunque estos hallazgos pueden hacer que un médico sospeche que un niño tiene leucemia, la presencia de la enfermedad, generalmente no se puede diagnosticar con certeza sin observar una muestra de células de la médula ósea”, señala.

2. Biopsia y aspirado de médula ósea

Estas pruebas consisten en tomar muestras de las parte posterior de los huesos de la pelvis. Las pruebas suelen realizarse al mismo tiempo. Antes de realizarlas se adormece la parte del cuerpo con anestesia local, y para evitar que el niño se mueva, en ocasiones se le administra algún somnífero.

Luego se inserta una aguja delgada y hueca en el hueso y se aspira un poco de médula ósea líquida con una jeringa. Tras esto se extrae un pequeño trozo de hueso y de médula para realizar la biopsia y se presiona el sitio para detener el sangrado. Las muestras se envían al laboratorio para su análisis.

3. Punción lumbar 

Para realizar esta prueba el médico aplica anestesia en la parte baja de la espalda, sobre la columna vertebral. En este caso también suelen administrarse medicamentos para que el niño se adormezca. 

Se introduce una aguja pequeña y hueca entre los huesos de la columna vertebral para extraer un poco de líquido que se envía a un laboratorio para su posterior análisis. El objetivo de esta prueba es detectar células leucémicas en el líquido cefalorraquídeo (CSF), que es el líquido que baña el cerebro y la médula espinal.

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4. Biopsia de los ganglios linfáticos

Con este tipo de biopsia es posible detectar linfomas, pero se usa pocas veces para detectar leucemia en los niños. Un cirujano realiza el procedimiento en el que corta piel para extirpar un ganglio linfático.  

“Si el ganglio está localizado cerca de la superficie de la piel, ésta es una operación simple. Sin embargo, resulta más compleja si el ganglio está dentro del tórax o del abdomen. Con más frecuencia, el niño necesitará anestesia general (el niño está dormido)”, anota.

¿Qué es la leucemia linfocítica aguda?

Las leucemias son cánceres que se originan en las células que normalmente madurarían hacia los diferentes tipos de células sanguíneas. La leucemia se originan en los glóbulos blancos pero también pueden comenzar en otros tipos de células sanguíneas.

La leucemia linfocítica aguda (ALL) comienza en la médula ósea y luego invade la sangre rápidamente. Se dice que es aguda porque porque puede progresar velozmente y si no se trata a tiempo, provoca la muerte en pocos meses. 

Además de estar en la sangre, la leucemia puede propagarse a otras partes del cuerpo como el hígado, el bazo, el sistema nervioso central (el cerebro y la médula espinal) y los testículos (en los hombres) y los ganglios linfáticos.