En la actualidad muchas personas llevan un ritmo de vida bastante ajetreado que provoca cansancio, sin embargo, si todo el tiempo te sientes cansado, seguramente hay errores en tu día a día que debes estar cometiendo.
Te podría interesar
Aunque el ajetreo diario puede ser agotador, muchos de los problemas de fatiga crónica provienen de hábitos que podemos modificar.
¿Cuáles son los errores que provocan que estés cansado todo el tiempo?
Desde malas decisiones alimenticias hasta patrones de sueño deficientes, estos errores cotidianos drenan nuestra energía sin que nos demos cuenta. A continuación, te revelamos los algunos factores más comunes que podrían estar robándote tu vitalidad:
- Dormir suficiente, pero no con calidad
Muchas personas creen que con cumplir 7-8 horas de sueño ya están cubiertas, pero la realidad es que la calidad del descanso es igual de importante que la cantidad. Interrupciones frecuentes, ronquidos, o incluso usar el celular antes de dormir afectan las fases profundas del sueño. Esto impide que el cuerpo se repare adecuadamente y regenere energía. Además, dormir en horarios inconsistentes desregula el ritmo circadiano, dejándote agotado incluso después de "descansar" toda la noche.
- Saltarse comidas o alimentarse mal
El ayuno prolongado o consumir alimentos ultraprocesados provoca picos y caídas bruscas de azúcar en la sangre, lo que deriva en fatiga constante. Una dieta baja en proteínas, hierro y vitaminas B (esenciales para la energía) también contribuye a la sensación de agotamiento. Peor aún, muchos recurren al café y a snacks azucarados para "reactivarse", creando un círculo vicioso de energía artificial seguida de un bajón aún mayor.
- Hidratarse poco y abusar del café
La deshidratación leve es una causa frecuente de fatiga, ya que la sangre se espesa y el corazón trabaja más para oxigenar el cuerpo. Muchos confunden la sed con hambre o cansancio, empeorando el problema. Por otro lado, aunque el café da un impulso temporal, su consumo excesivo (especialmente después del mediodía) altera el sueño y genera dependencia. El resultado: te despiertas cansado y necesitas más café al día siguiente, repitiendo el ciclo.
- Ser sedentario o entrenar en exceso
Pasar horas sentado ralentiza la circulación y el metabolismo, haciendo que te sientas sin energía. Sin embargo, el extremo opuesto (ejercicio intenso sin descanso adecuado) también agota las reservas corporales. El movimiento regular mejora la oxigenación y libera endorfinas, pero el cuerpo necesita recuperación.
- Ignorar el estrés y no desconectarse
El estrés crónico mantiene al cuerpo en un estado constante de alerta, consumiendo energía reserves. Muchos subestiman cómo la sobrecarga laboral, las pantallas antes de dormir y la incapacidad para relajarse afectan su vitalidad. Peor aún, el agotamiento mental suele manifestarse como fatiga física. Incorporar técnicas de manejo de estrés (respiración, meditación o hobbies relajantes) puede marcar una diferencia radical en tus niveles de energía.
Para enterarte de toda la información que necesitas sobre salud y bienestar síguenos en Facebook y TikTok.