Cuando hablamos de cáncer esofágico, uno de los factores más preocupantes es lo silencioso que puede ser incluso durante años. De ahí la importancia de prestar atención a los signos y síntomas que, aunque sutiles, podrían ser una señal de alerta. ¿Tienes reflujo? Cuidado, podría ser esta enfermedad.
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¿Tienes reflujo? Cuidado, podría ser esta enfermedad
En entrevista con SuMédico, la Dra. Georgina Filio, Gerente Médica de Tumores Gastrointestinales para MSD, nos dio la siguiente recomendación médica: No normalicen molestias persistentes como el reflujo ácido, y mucho menos recurran a la automedicación como una solución a largo plazo.
En el marco de la conmemoración del Día Mundial del Cáncer de Esófago, que sucede cada 30 de abril, la experta señaló que este tipo de cáncer suele desarrollarse a lo largo de 15 o incluso 20 años, por lo que, aunque los síntomas no se presenten de manera inmediata o constante, eso no significa que deban ignorarse.
Según los datos de Globocan de 2022, explicó, en México hubo una incidencia de aproximadamente mil 433 personas que se diagnosticaron con cáncer de esófago y la mortalidad fue de mil 271 personas. O sea, la mayoría fallecieron por esta por esta afección, seguramente ya en etapas más avanzadas.
En la mayoría de los casos, el cáncer de esófago se diagnostica en personas mayores de 55 años. Sin embargo, este no es un dato aislado: se trata de una consecuencia directa de un estilo de vida mantenido por décadas.
Nos explicó que uno de los factores de riesgo más conocidos es el tabaquismo: “Fumar una o dos cajetillas al día durante años impacta directamente en la salud del esófago”. Otro elemento a considerar es el consumo excesivo de alcohol, que, en combinación con una dieta poco saludable y la automedicación frecuente para problemas digestivos, crea un terreno fértil para el desarrollo de enfermedades crónicas y potencialmente mortales.
Por eso, la prevención no se limita a una revisión médica anual. Implica observar nuestro cuerpo con atención, identificar cuándo algo no está funcionando como debería y actuar en consecuencia. “Sí, todos podemos tener un episodio de reflujo tras una comida pesada o en un momento de estrés. Pero si esto se convierte en algo recurrente, no debe verse como normal. Ningún malestar que persiste por semanas, meses o incluso años debería ser ignorado”, enfatizó.
Prevención, y un diagnóstico oportuno
La Dra. Georgina Filio concluye que, “ante cualquier signo o síntoma gastrointestinal que se repita, acude con un médico. No te automediques, no normalices el dolor o la incomodidad, y sobre todo, no esperes a que la situación se agrave. En muchos casos, una consulta a tiempo puede marcar la diferencia entre un tratamiento oportuno y un diagnóstico tardío”.
Finalmente sugiere adoptar hábitos saludables, como dejar de fumar, moderar el consumo de alcohol y mejorar la alimentación, ya que esto no solo reduce el riesgo de cáncer esofágico, sino que mejora significativamente la calidad de vida. Entonces, ¿tienes reflujo?