Ante la inminente llegada de la época de festejos, en estos meses resulta muy importante prestar atención a la ingesta de alimentos y diversos platillos, qué mejor que de la mano de SuMédico para cuidar y mantener controlados tus niveles de colesterol, toda vez que, de acuerdo con la Encuesta Nacional de Salud, al 2022 estadísticamente existe un incremento de alrededor de 2% de la población con colesterol elevado, además de ser muy frecuente y en ocasiones existe un sub-diagnóstico.
Si bien el colesterol es una sustancia básica para la composición de las partes de nuestras células y forma parte de hormonas diversas fundamentales para nuestro cuerpo y su buen funcionamiento, existen dos tipos de colesterol: HDL (colesterol “bueno”) y LDL (colesterol “malo”).
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El nivel de colesterol es uno de los factores que forman parte de las condiciones que integran al síndrome metabólico, considerado desde hace algunos años como un problema de salud nacional y por ello es tan importante que las personas con problemas de colesterol y/o triglicéridos mantengan el seguimiento a su tratamiento y bajo la supervisión de tu médico –que ya te conoce–, acudiendo en las fechas acordadas a consulta y seguir las recomendaciones que acompañarán la receta, así como los horarios y momentos específicos para la toma del medicamento de acuerdo con cada caso particular.
Si bien cada caso es único, por ello la frecuencia referida para la revisión y el control del colesterol dependerá de nuestra historia clínica. En las personas mayores a 45 años de edad que no tienen factores de riesgo es importante efectuar una revisión cada año o cada dos años, sin embargo, en las personas que ya cuentan con un diagnóstico con niveles altos de colesterol y que cursan tratamiento, la recomendación es tener una revisión cada 3 a 6 meses.
¿Cómo controlar los niveles altos de colesterol?
Para los casos donde se reportan niveles exageradamente elevados de colesterol y que conllevan el riesgo de presentar problemas cardiovasculares, se debe tener un control de cada 6, 8 a 12 semanas. Por ello la importancia de conocer nuestros factores de riesgo y, con la guía experta de nuestro médico, conocer el tipo de alteración de colesterol, así como el tipo de medicamentos, recomendaciones e indicaciones que nuestro médico establecerá en el corto, mediano y largo plazos.
Ante todo, es necesario recurrir a la experiencia y conocimiento científico que nos aporta nuestro médico, pues las alteraciones en los niveles de colesterol son condiciones silenciosas, pero cuando se alcanzan niveles muy elevados (mayores a 200), existe la presencia de vértigo metabólico y en los casos más graves, se encuentran cúmulos de grasa en el cuerpo.
Te recomiendo que platiques con tu médico para establecer metas de control y, lo más importante, que ambos acuerden realizar, por lo menos una vez al año, una valoración de lípidos para analizar nuestros niveles de colesterol (tanto malo como bueno) y los triglicéridos.
Lo mejor será mantener una constante y cercana comunicación con tu médico para definir los objetivos para el control y sobre todo, que por lo menos una vez cada año programen una valoración de lípidos para conocer los niveles de colesterol y triglicéridos.
Los niveles altos de colesterol desencadenan problemas cardiovasculares, por ello la constancia en las revisiones resulta crucial, pues la gran parte de los pacientes que actualmente detectamos con problemas de colesterol, llevan al menos de 100 a 20 años.
Tu médico es tu mejor aliado y te orientará para conocer las herramientas existentes que ayudan a facilitar tu apego al tratamiento, tales como los programas de apoyo a pacientes, creados por los laboratorios farmacéuticos especialmente para condiciones crónicas, es decir, en las que el tratamiento deberá ser tomado de por vida a raíz de la detección de la enfermedad.
Recuerda que un factor importante es evitar prácticas tales como la automedicación, el cambio de receta o incluso el uso de remedios caseros, en este caso del colesterol como en todas las condiciones que pueden afectar a tu cuerpo, lo más importante es conocer y seguir las indicaciones y recomendaciones de #LoQueDiceTuMédico, en la receta, que es el documento oficial que respalda la personalización de tu tratamiento exclusivamente para tu caso particular.
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