¿Un taquito o tortita de queso de puerco? Claro, es delicioso, pero hay que tener cuidado con el consumo de este alimento, ya que recientemente la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) analizó su contenido y no encontró resultados muy favorables. Te decimos qué tan saludable es comerlo y las precauciones que debes tener en cuenta.
El queso de puerco es un embutido típico en tortas y antojitos mexicanos y recientemente fue analizado por expertos de Profeco, quienes encontraron que tiene un alto contenido de sodio y grasas saturadas.
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No se prohíbe su consumo, pero es recomendable hacerlo con moderación, especialmente en personas con hipertensión, enfermedades cardíacas o renales.
¿Qué tiene realmente el queso de puerco? Estos son sus ingredientes y los efectos que tienen en la salud cuando se consume con frecuencia.
Queso de puerco: ¿es saludable?
En la Revista del Consumidor de mayo de 2025, la Profeco publicó los resultados de un análisis realizado a 10 productos de queso de puerco.
Lo primero que detallan es que este producto se elabora a partir de carne de cerdo (especialmente de la cabeza), piel y cartílago, lo que le otorga una textura gelatinosa y un sabor característico. Aunque aporta colágeno, que beneficioso para la piel y las articulaciones, también contiene ingredientes poco saludables, como:
- Grasas saturadas: Cuando se consumen en exceso pueden elevar los niveles de colesterol LDL, aumentando el riesgo de enfermedades cardiovasculares.
- Sodio: Se ha comprobado que en grandes cantidades, contribuye a la hipertensión arterial y problemas renales.
- Conservadores y aditivos: Especialmente nitratos y nitritos, asociados a riesgos para la salud si se consumen en exceso.
Ante estos hallazgos, la Profeco sugiere limitar el consumo de queso de puerco a una o dos veces por semana máximo, acompañándolo de verduras frescas para equilibrar la ingesta nutricional.
Además, se aconseja evitarlo en dietas altas en sodio o en pacientes con enfermedades cardiovasculares, renales o con hipertensión, ya que podrían tener complicaciones de salud importantes.
"El alto consumo de sodio, azúcar y grasas saturadas se asocia con enfermedades del corazón, lo que provoca miles de muertes al año", advierte el estudio.
Consecuencias de consumir en exceso queso de puerco
En México, la Profeco detalla que se tiene el treceavo lugar en consumo de carne a nivel mundial, con un promedio anual de 65 kg por persona, según datos del Consejo Mexicano de la Carne.
El consumo anual por persona de productos cárnicos procesados es de 8.6 kg y las salchichas y jamones son los de mayor demanda, con el 90% del consumo de carnes frías, seguidos de tocino, chorizo, longaniza, mortadela y queso de puerco, agregan.
Si bien el queso de puerco no es de las carnes procesadas más consumidas, puede ser una opción económica a la que se recurra con frecuencia, lo que puede tener consecuencias en la salud, como:
- Aumento de la presión arterial (hipertensión)
- Problemas renales, como formación de piedras o cálculos
- Mayor riesgo de enfermedad cardiovascular
- Tendencia al aumento de peso
- Mayor riesgo de diabetes tipo 2
Recordemos que la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda no consumir más de 2 gramos de sodio al día, lo que equivale a 5 gramos de sal. Desafortunadamente, en México el consumo promedio de sodio duplica esta cantidad, lo cual representa un riesgo real para la salud pública .
Por otro lado, el Instituto Nacional de Diabetes y Enfermedades Digestivas y Renales (NIDDK) señala que el consumo elevado de proteínas animales, incluyendo carnes procesadas como el queso de puerco, puede aumentar la probabilidad de desarrollar piedras en los riñones.
Recuerda que no se trata de privarte de un gustito de vez en cuando, pero debes hacerlo de manera moderada y sin dejar de lado hábitos saludables como hacer ejercicio, tomar al menos dos litros de agua al día y consumir en abundancia frutas, verduras, cereales integrales y carnes magras o bajas en grasa.
"Una dieta saludable, sin exceso de sodio ni grasas saturadas, ayuda a evitar enfermedades no transmisibles, como las del corazón", concluye Profeco.