En el marco del Foro de Innovación Médica, organizado por Bayer y Sumédico, el doctor Diego Antonio Preciado Estrella ofreció una charla para difundir todos los avances en cirugía para tratar el cáncer de próstata, el tumor más común en hombres de la tercera edad de México.
En la charla, el especialista expuso al robot Da Vinci, un artilugio de cirugía robótica con sistema propio que ha revolucionado el tratamiento de esta patología, ofreciendo mejores resultados en términos oncológicos.
"Los robots quirúrgicos tienen aplicación prácticamente en todas las áreas de la cirugía, desde neurocirugía no tanto. Sobre todo cabeza y cuello, obviamente el tórax, pulmón, abdomen y sobre todo la pelvis. Lo usamos mucho los urólogos, lo usan ginecólogos. ¿Por qué? Porque te permite acceder con mucha precisión a estas zonas", señala el médico.
¿Qué es un robot Da Vinci y para qué funciona?
El sistema quirúrgico Da Vinci es una plataforma robótica controlada por un cirujano especializado. No opera de forma autónoma: cada movimiento del robot replica con exactitud los movimientos de las manos del médico.
La cirugía robótica permite al cirujano realizar procedimientos complejos con mayor precisión, flexibilidad y control que las técnicas convencionales. Esto es especialmente relevante en el cáncer de próstata, donde la glándula está rodeada de nervios y estructuras clave para la continencia urinaria y la función sexual.
De acuerdo con el Instituto Nacional de Cáncer de los Estados Unidos, "La próstata es una glándula que se ubica debajo de la vejiga y enfrente del recto. La próstata rodea parte de la uretra, un conducto que transporta la orina desde la vejiga hasta el pene. La próstata es una glándula que ayuda a producir semen, el líquido blanco y lechoso que transporta el esperma cuando un hombre eyacula. Durante la eyaculación, los músculos de la próstata empujan el semen hacia la uretra y hacia afuera".
La visualización en alta definición y en tres dimensiones permite al cirujano identificar con claridad los tejidos, reduciendo el daño a estructuras sanas.
No obstante, no cualquier cirujano puede manejar esta tecnología, pues se requiere de un largo proceso de capacitación y certificación para poder utilizar este sistema novedoso.
"Para eso pues (obtener la certificación) tienes que hacer primero la especialidad en cirugía en alguna de las subespecialidades: otorrino, cirugía oncológica, urología. Después de eso tienes que tener un adiestramiento en el manejo de la plataforma, que actualmente hay programas que lo hacen muy dinámico, incluso en algunos meses consigues la certificación, cuando tú demuestras en una plataforma, es decir, no en un paciente, que tú tienes las habilidades. Y de hecho, la forma de manejarlo es muy similar a lo que tenemos, por ejemplo, en un videojuego", explica Preciado.
"De hecho, nos nuestras generaciones que crecimos con los videojuegos, pues nos permiten tener mucho esa orientación espacial a través de una pantalla", agrega.
La cirugía robótica se ha consolidado como una de las mejores opciones para la prostatectomía radical debido a sus múltiples ventajas:
- Incisiones más pequeñas
- Menor pérdida de sangre
- Menos dolor postoperatorio
- Menor riesgo de complicaciones
- Recuperación más rápida
- Mejor preservación de nervios
- Mayor precisión quirúrgica
La experiencia del cirujano es un factor determinante para obtener buenos resultados. Cabe señalar que no todos los pacientes son candidatos ideales. La elección del tratamiento depende de la edad, el estado general de salud, la etapa del cáncer y las características del tumor.
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