Los medicamentos modernos para bajar de peso actúan directamente en el cerebro y el sistema digestivo para disminuir el apetito.
En los últimos años, medicamentos como semaglutida, liraglutida o tirzepatida se han vuelto protagonistas en el tratamiento de la obesidad. Muchos los conocen por su capacidad para quitar el hambre, empero su acción es mucho más profunda y regulada por mecanismos hormonales.
Neurólogos de la Universidad de Pensilvania han publicado un estudio en la revista Nature, el cual devela los secretos de estas drogas en la salud de los pacientes. Según la investigación, esta clase de drogas demostraron suprimir la actividad neuronal del núcleo accumbens, una región asociada con el placer, la motivación y la recompensa.
Aquí en Sumédico te explicamos el efecto en la química de tu cerebro y estómago.
¿Cómo actúan esta clase de medicamentos en el cerebro para disminuir el apetito?
Los medicamentos tienen múltiples efectos en el cuerpo humano:
- Aumentan la sensación de llenura.
- Reducen el hambre entre comidas.
- Disminuyen impulsos por comer en exceso.
- Ayudan a controlar picos de glucosa.
Estas drogas activan neuronas de saciedad y reducen señales de hambre, lo que produce una disminución real del apetito. Es decir, la persona come menos por fuerza de voluntad: realmente siente menos deseo y menos necesidad de comer.
Según Enrique Alpañés, columnista del diario español El País, "El mecanismo básico sería algo así: cuando la comida llega a nuestro intestino, se segregan de forma natural las incretinas, unas hormonas cuya función principal es estimular la secreción de insulina y avisar al cerebro de que ya ha llegado comida, dando sensación de saciedad".
Adicionalmente, esta clase de medicamentos reducen el apetito porque ralentizan el vaciamiento del estómago. Esto hace que los alimentos permanezcan más tiempo allí, generando una saciedad duradera. Este efecto ayuda a controlar el apetito y mejorar la adherencia a un patrón alimentario saludable.
Vale la pena recalcar que esta clase de drogas deben acompañarse de hábitos saludables y supervisión médica, ya que modifican procesos hormonales y digestivos.
Estos medicamentos son para bajar unos kilos rápidamente y tratar obesidad con factores de riesgo. Tomarlos sin control puede:
- Desbalancear la alimentación
- Aumentar efectos secundarios
- Interferir con otros medicamentos
- Ocultar causas médicas del aumento de peso
¿Has tomado alguna de estas medicinas?
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